Cientos de mineros siguen atrapados desde hace más de dos meses en Sudáfrica

El rescate en la mina de oro de Stilfontein arroja 118 mineros rescatados, incluidos 36 fallecidos, mientras activistas por los derechos humanos y autoridades debaten la gestión de la crisis.

Mineros sudafricanos rescatados con niveles visibles de desnutrición, 14 de enero de 2025.
Foto: Reuters vía @MarioNawfal (X).

En Stilfontein, al noreste de Sudáfrica, se han rescatado 118 mineros tras semanas atrapados bajo tierra en la mina de oro Buffelsfontein, según informaron este martes las autoridades locales y el diario sudafricano The Mail & Guardian. Entre los rescatados, 36 fueron encontrados sin vida, y las imágenes difundidas por activistas muestran las deplorables condiciones físicas de los sobrevivientes. Según la portavoz policial Athlenda Mathe, las operaciones de rescate, organizadas por una empresa especializada, han tenido un coste estimado de 12 millones de rands sudafricanos (unos 610.000 euros).

Los mineros, conocidos como zama-zamas (un término zulú que significa “arriesgarse”), llevaban más de dos meses en el lugar, con acceso limitado a agua y comida, situación que se agravó tras la intervención policial en octubre. Aunque el Tribunal Superior de Pretoria permitió en diciembre la reanudación de los suministros humanitarios, las denuncias de abusos bajo tierra, incluida la retención forzada por hombres armados, complicaron aún más el escenario. El rescate ha sido acompañado por una polémica intervención policial que incluye la detención de los sobrevivientes por cargos de “minería ilegal” y “violaciones migratorias”.

Esta tragedia, enmarcada en la operación policial “Vala Umgodi” (Cerrar la mina), pone en evidencia el impacto de la minería ilegal en Sudáfrica. Según datos oficiales, más de 1.300 mineros han salido a la superficie desde agosto, revelando la magnitud de esta práctica clandestina que afecta tanto a la economía como a las condiciones de vida de la clase trabajadora. Organizaciones como Lawyers for Human Rights han instado al gobierno a tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad y los derechos de los atrapados, mientras el país reflexiona sobre cómo evitar que se repitan episodios similares.