La Fundación BBVA señala que la baja productividad en el Estado español no se debe al trabajo, sino al capital

Un informe de la entidad financiera destaca el estancamiento de la productividad total de los factores.

Imagen de archivo de trabajadores de fijación de cables de teléfono en Xixón (Asturies) en 2015.
Foto: percds (iStock).

La Fundación BBVA, en su reciente informe que aporta datos sobre la productividad en el Estado español, ha confirmado que el bajo rendimiento económico no está relacionado con la productividad del trabajo, que ha crecido un 17% desde el 2000, sino con la caída de la productividad del capital (-24%) y la menor eficacia en la rentabilización conjunta de capital y trabajo (-7%). Según el informe, la ineficiencia se debe a “una regulación y una intervención pública inadecuadas en áreas clave de la economía”. Estas políticas habría permitido que el capital privado obtenga rendimientos sin necesidad de innovar o asumir riesgos. Sin embargo, las recientes reformas, como la subida del SMI y el control horario, están obligando al capital a invertir en proyectos más productivos y eficientes.

El informe también destaca que la transición hacia una economía más productiva se está viendo favorecida por los fondos NextGeneration EU, que impulsan proyectos de transición “verde” y digital. A pesar de ello, el estudio alerta sobre “la necesidad de una mayor inversión en estas áreas”, estimando que la Unión Europea debería destinar unos 850.000 millones de euros anuales para financiarlas. En este sentido, el informe de la entidad financiera propone tres líneas de acción: continuar homologando los estándares laborales con los de la UE, reducir la rentabilidad del sector inmobiliario y evitar que el capital privado se beneficie de la privatización de servicios públicos.

Finalmente, la Fundación BBVA subraya la relevancia de centrarse en las empresas rezagadas, aquellas con menor productividad en cada sector, cuyo aumento de eficiencia podría incrementar la productividad agregada de la economía del Estado español en un 4,9%. A pesar de los avances en productividad en algunos sectores, el informe concluye que “una estrategia macroeconómica orientada a mejorar la competitividad y fomentar la inversión en sectores clave es esencial para revertir la tendencia de estancamiento observado en los últimos años”.