Altos funcionarios de la administración de Donald Trump debatieron planes militares sensibles a través de la aplicación de mensajería encriptada Signal, en un grupo que, “por error”, incluyó al periodista Jeffrey Goldberg, editor en jefe de The Atlantic. La Casa Blanca reconoció la autenticidad del incidente y afirmó que está revisando cómo se agregó el número de Goldberg a la conversación, según informó The Washington Post.
De acuerdo con el artículo de The Atlantic, la conversación en Signal fue iniciada por el asesor de seguridad nacional, Michael Waltz, e incluyó al vicepresidente J.D. Vance, el secretario de Estado Marco Rubio, el secretario de Defensa Pete Hegseth, la directora de Inteligencia Nacional Tulsi Gabbard y el director de la CIA John Ratcliffe, entre otros altos funcionarios.
En la discusión se abordaron detalles de la operación militar del 15 de marzo contra objetivos del Movimiento Ansarrolá en Yemen, incluyendo estrategias de ataque y el contexto político de la acción. Hegseth negó que se hayan compartido “planes de guerra” y calificó la información publicada como “basura”, según declaraciones recogidas por The Washington Post.
El incidente ha generado críticas en el Congreso. El senador demócrata Jack Reed lo calificó como “una de las fallas de seguridad operacional más graves” que ha visto, mientras que el republicano Mike Johnson minimizó el hecho, afirmando que “no se puso en peligro a nadie” y que el gobierno “ha reconocido el error y tomará medidas para evitar que se repita”.
Expertos en seguridad han señalado que “el uso de aplicaciones no gubernamentales para discutir asuntos clasificados supone un riesgo significativo, ya que estos dispositivos pueden ser vulnerables a ciberataques”, según explicó el especialista en ciberseguridad Matt Blaze a The Washington Post.