Diversos destinos naturales y urbanos están experimentando un aumento exponencial de visitantes tras viralizarse en TikTok. Según indica Business Insider en una noticia publicada 18 de abril, esta exposición digital genera problemas como acumulación de residuos, deterioro de infraestructuras, restricciones al acceso e incomodidad entre los residentes. Localidades como Hallstatt (Austria), Lago di Braies (Italia), o Setenil de las Bodegas (Estado español) han visto multiplicarse las visitas tras aparecer en vídeos que superan los millones de visualizaciones. En algunos casos, se han llegado a cerrar accesos o instalar barreras físicas ante la presión turística.
El impacto se extiende a zonas protegidas y enclaves rurales cuya capacidad de acogida es particularmente limitada. En Fujikawaguchiko (Japón), autoridades locales instalaron una valla para frenar la masificación frente a un punto icónico con vistas al Monte Fuji. En Es Vedrà (Eivissa, Balears), propietarios privados prohibieron el paso a miradores debido a la degradación ambiental.
Según datos recogidos por la plataforma Bounce, lugares como el Parque Nacional de Plitvice (Croacia) alcanzaron más de 2,1 millones de búsquedas anuales en Google y casi 30 millones de visualizaciones en TikTok, lo que derivó en restricciones al acceso para evitar daños en pasarelas y ecosistemas.
El fenómeno, impulsado por algoritmos que priorizan contenido visual atractivo, está siendo cuestionado por sus consecuencias sociales y ecológicas. “El viajero de hoy no busca conocer, sino capturar”, afirma Business Insider en su análisis, en el que se advierte del riesgo de que la ausencia de planificación turística quede subordinada a tendencias efímeras sin considerar la capacidad real de acogida ni las condiciones de las comunidades receptoras. Mientras tanto, algunos gobiernos y autoridades locales están comenzando a aplicar medidas para tratar de contener los efectos de esta modalidad de turismo.