Europa venderá cazas Eurofighter a Arabia Saudí y Turquía

Londres, Berlín, Roma y Madrid unen fuerzas para exportar armamento a potencias acusadas de vulnerar derechos humanos, en un giro estratégico marcado por el rearme y la competencia con EE. UU.

Memorando de entendimiento entre Reino Unido y Turquía para la venta de cazas Eurofighter.
Foto: vía @avionot (X)

Londres y Berlín han cerrado un acuerdo calificado de “histórico” por las autoridades británicas, que permite, junto con el Estado español e Italia la venta conjunta de cazas de combate Eurofighter Typhoon a Arabia Saudí y Turquía, según fuentes oficiales y el Financial Times. La operación implica un fuerte cambio de rumbo: hasta ahora, exportar armamento a Riad o Ankara estaba formalmente vetado por su historial en derechos humanos. Estos principios, que parecían preocupar mucho a los líderes europeos hasta ahora, ceden ante la actual orientación militarista de la Unión Europea, impulsada por la presión geopolítica y una creciente dependencia frente a unos Estados Unidos que marca otras prioridades, pone sobre la mesa no solo los Eurofighter, sino también la futura exportación de aviones Airbus A400M y blindados Boxer.

El giro lo simboliza especialmente Alemania, cuyo nuevo canciller Friedrich Merz —con apoyo del SPD— ha abandonado los bloqueos impuestos por gobiernos anteriores ante países “problemáticos”, como los liderados por Mohamed bin Salman y Recep Tayyip Erdoğan. Con la industria armamentística europea resintiéndose frente al dominio de los F-35 estadounidenses, París, Roma, Londres y Berlín buscan socios que garanticen volumen, estabilidad y retorno. Madrid, aunque ha criticado el aumento del gasto militar, no ha dudado en estrecharle la mano a Turquía y comprar los entrenadores Hürjet para renovar su flota aérea. Londres, por su parte, quiere atraer a Arabia Saudí al programa futuro de su caza Tempest.

Este nuevo paso hacia una Europa rearmada se enmarca en una geopolítica marcada por la desconfianza mutua entre aliados y el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca. La UE ha anunciado que destinará 131.000 millones de euros a “seguridad” en su próximo marco presupuestario, recortando fondos en agricultura y servicios sociales, entre otros.

Mientras tanto, los grandes actores europeos trazan alianzas bilaterales fragmentadas —como el escudo nuclear entre París y Londres—, dejando entrever un orden multipolar donde los supuestos “principios éticos” se diluyen ante la lógica descarada de bloques, mercados y poder aéreo.