El Movimiento de Resistencia Islámica, Hamas, ratifica su compromiso con el acuerdo de alto el fuego alcanzado con el Estado de Israel, desmintiendo las acusaciones de la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. El gobierno israelí ha señalado a Hamas como “responsable de crear una crisis de última hora” que habría entorpecido la implementación del acuerdo para el intercambio de prisioneros. Izzat al-Risheq, miembro del buró político de Hamas, ha aclarado a través de Telegram que está comprometido con los términos del acuerdo de alto el fuego, “tal y como lo anunciaron los mediadores”.
El acuerdo, que fue mediado en Qatar y ha sido confirmado por diversas fuentes, contempla un alto el fuego de 42 días y un intercambio de prisioneros, en el que se incluiría la liberación de todos los prisioneros israelíes capturados durante la incursión de la Resistencia Palestina el 7 de octubre de 2023. Sin embargo, la oficina de Netanyahu ha subrayado que “no se convocará una reunión para aprobar el acuerdo hasta que los mediadores confirmen que Hamas ha aceptado todos los términos”.
Desde el inicio de la operación militar de los sionistas en Gaza hace 15 meses, al menos 47.000 palestinos han fallecido a causa del asedio, y otros 104.000 han sido gravemente heridos, según informes del Ministerio de Salud de Gaza. En el lado de las fuerzas de ocupación, se desconoce la cifra exacta de bajas, ya que el Estado de Israel no aclara cuántos militares han sido abatidos en suelo gazatí. En cuanto a los prisioneros, se estiman que la Resistencia Palestina mantiene con vida alrededor de un centenar de prisioneros israelíes, mientras los presos palestinos en las prisiones del Estado de Israel se cuentan por miles. Muchos de ellos son menores y detenidos bajo detención administrativa sin cargos.