Bruselas impulsa un plan europeo para construir “viviendas públicas asequibles”

La Comisión Europea crea un grupo de trabajo para diseñar una estrategia que aborde la crisis habitacional en la UE para 2026.

Viviendas construídas con fondos europeos en Lituania.
Foto: Comisión Europea

La Comisión Europea, liderada por Ursula von der Leyen, ha anunciado una iniciativa para abordar la crisis de vivienda que afecta a millones de habitantes en la Unión Europea. Por primera vez, se ha designado un comisario de Vivienda, el danés Dan Jørgensen, quien trabajará en la creación de un Plan de Vivienda Asequible. Según El País, este plan, que no estará listo antes de 2026, incluirá un diagnóstico de la situación actual y recopilará “prácticas exitosas de los países miembros”. Sin embargo, la medida llega en un momento en que la crisis habitacional está a punto de explotar en Europa, con precios en niveles récord tanto en la compra como en el alquiler y, en consecuencia, con una notable crispación social.

El plan pretende ofrecer asistencia técnica a gobiernos locales, regionales y estatales, así como atraer inversiones públicas y privadas para construir viviendas sociales. Aunque ciudades como Barcelona ya han realizado proyectos piloto similares con financiación del Banco Europeo de Inversiones (BEI), como la construcción de 2.059 pisos públicos durante el mandato de la exalcaldesa Ada Colau, la iniciativa europea llega tarde y con un enfoque aún poco concreto. Un alto cargo de la Comisión señaló que “los edificios con mayor rendimiento energético reducen costes y generan beneficios para la sociedad”, pero no aclaró cómo se financiarán estas medidas a gran escala.

Además, la financiación del proyecto presenta desafíos estructurales, ya que la situación de la vivienda en la UE presenta grandes disparidades entre los países miembro: el Estado español, con solo un 3,3% de viviendas sociales, está muy por debajo de países como Países Bajos (29%) o Austria (24%). Además, el gasto en vivienda social en el Estado español es cuatro veces menor que la media europea, según datos del Ministerio de Vivienda. Entre 2015 y 2023, el coste de comprar una vivienda aumentó un 46,7%, mientras que el alquiler subió un 18%. La Comisión también estudiará medidas para reducir los costes de construcción y abordar fenómenos como el alquiler turístico, que ha distorsionado el mercado en algunas regiones. Sin embargo, la falta de plazos concretos y la lentitud en la implementación del plan plantean dudas sobre su efectividad real en un contexto de emergencia habitacional.