China busca fomentar los servicios y el consumo interno

El gobierno chino establece el objetivo de un crecimiento del 5% en 2025, mientras enfrenta la presión internacional de cambiar su enfoque económico.

Imagen de archivo del primer ministro chino Li Qiang.
Foto: Bloomberg

En medio de un panorama económico incierto, China ha anunciado su intención de fortalecer el sector de servicios para impulsar su crecimiento económico en los próximos años. Los funcionarios chinos han establecido como objetivo un crecimiento cercano al 5% para 2025, una meta ambiciosa que dependerá de un impulso a los sectores como el consumo interno y la digitalización de la economía. A pesar de este optimismo, el país se enfrenta a la necesidad de “reequilibrar” su economía, lo que implica reducir la dependencia de las exportaciones y de la inversión en infraestructuras, áreas que históricamente han sido pilares de su desarrollo.

Por otro lado, Estados Unidos ha instado a China a hacer ajustes significativos en su estructura económica. Washington pide que Pekín impulse el consumo interno y reduzca las políticas que favorecen el superávit comercial con otros países, especialmente con EEUU. La administración estadounidense ha expresado preocupaciones sobre las prácticas comerciales chinas, señalando “la necesidad de una economía más equilibrada que pueda beneficiar a ambos países a largo plazo”. Los analistas en Xinhua y Bloomberg coinciden en que el futuro de las relaciones comerciales entre ambos gigantes dependerá de cómo Pekín logre implementar estas reformas.

Mientras tanto, la situación interna de China sigue siendo compleja. Aunque el gobierno pretende estimular el consumo y la innovación, los desafíos estructurales, como la desaceleración del crecimiento en el mercado inmobiliario y la presión demográfica, amenazan con complicar el camino hacia la recuperación. Los esfuerzos por reformar el modelo económico podrían tener un impacto global, con implicaciones no solo para el comercio sino también para el entorno geopolítico.