El 68% de los pisos de dos habitaciones en alquiler en el Estado español tienen un precio que supera el umbral de asequibilidad para familias con ingresos medios, según un estudio de Idealista basado en datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Para considerar un alquiler “razonable”, las familias no deberían destinar más del 30% de sus ingresos al pago de la vivienda, lo que equivale a un máximo de 764 euros mensuales. Sin embargo, en ciudades como Málaga y Palma, solo el 7% y 8% de los alquileres cumplen con este criterio, con precios de mercado que alcanzan los 1.197 y 1.539 euros, respectivamente.
En otras grandes ciudades como València, Alacant, Barcelona y Madrid, la accesibilidad también es limitada, con solo entre el 12% y 16% de los alquileres considerados “razonables”. En el extremo opuesto, ciudades como Ciudad Real y Teruel destacan por tener el 98% de sus alquileres dentro del rango asequible, seguidas de Jaén (94%) y Zamora (92%). Donostia, aunque tiene los alquileres “razonables” más altos (1.118 euros), solo ofrece un 22% de viviendas accesibles para familias con ingresos medios.
El estudio también analiza la “tasa de esfuerzo”, es decir, el porcentaje de ingresos que las familias deben destinar al alquiler. Barcelona lidera esta lista, con un 49% de los ingresos destinados a la vivienda, seguida de Palma (45%) y Málaga (42%). En contraste, ciudades como Ciudad Real (16%) y Teruel (19%) presentan las tasas de esfuerzo más bajas. Estos datos son una muestra más de las marcadas diferencias regionales en el mercado de alquiler del Estado español y la creciente dificultad para acceder a una vivienda en las grandes urbes.