Continúan las manifestaciones en Turquía

A una semana del inicio de las protestas, el número de arrestos supera los 1.400, mientras los manifestantes mantienen su desafío a las autoridades turcas.

Protestas en Turquía.
Foto: János Bődey

Desde el inicio de las protestas el 19 de marzo, más de 1.400 personas han sido detenidas en toda Turquía, en el marco de manifestaciones contra la detención del alcalde opositor de Estambul, Ekrem Imamoglu, acusado de “corrupción y vínculos con el terrorismo”.

Los manifestantes, incluidos estudiantes y miembros del Partido Republicano del Pueblo (CHP), se han congregado en Estambul, Ankara e Izmir, desafiando las prohibiciones de manifestación impuestas por las autoridades.

A pesar de la represión, la respuesta de los manifestantes ha sido mantenerse firmes en sus demandas por la liberación de Imamoglu y la renuncia del presidente Recep Tayyip Erdogan. Los enfrentamientos con la policía, que incluyen el uso de gas lacrimógeno y detenciones por parte de las autoridades, continúan siendo una constante.

El líder de la oposición, Ozgul Ozel, advirtió ante la AFP que las detenciones “solo fortalecerían el movimiento”, asegurando que “nuestro número no disminuirá, sino que crecerá a pesar de las represalias”. Mientras tanto, el gobierno de Erdogan ha intensificado su postura, con el ministro del Interior, Ali Yerlikaya, afirmando que “no habrá concesiones a quienes terroricen las calles”.

El presidente, por su parte, ha calificado las protestas como “terrorismo callejero” asegurando que los manifestantes “no tienen salida”. A pesar de las detenciones, el descontento sigue siendo palpable, y muchos jóvenes, temerosos de represalias, cubren sus rostros mientras participan en las manifestaciones. La situación continúa siendo tensa, con nuevos arrestos reportados cada día.

El contexto de las protestas ha sido marcado por la creciente participación estudiantil, que reclama “derechos democráticos” y se desmarca de las acusaciones de “terrorismo”. Este sentimiento de disconformidad ha impulsado nuevas convocatorias, como una gran manifestación prevista para el sábado en el distrito de Maltepe, donde se exigirá la convocatoria de elecciones anticipadas.

Los arrestos de periodistas que cubrían los hechos, como el fotógrafo de AFP Yasin Akgul, también han aumentado las críticas internacionales, que denuncian la represión de la libertad de prensa.