China crece un 5,4% en el primer trimestre pese a los aranceles de EEUU

El crecimiento del PIB supera las previsiones, impulsado por el consumo y la producción industrial, pero analistas advierten de un fuerte frenazo en los próximos meses.

Foto: Getty Images

El producto interior bruto (PIB) de China creció un 5,4% interanual entre enero y marzo de 2025, según datos publicados este miércoles por la Oficina Nacional de Estadística, una cifra que supera la previsión del 5,1% recogida por Reuters y que iguala el crecimiento registrado en el último trimestre de 2024.

Este repunte se vio apoyado por un incremento del 5,9% en las ventas minoristas y un aumento del 7,7% en la producción industrial en marzo, ambos por encima de las expectativas del mercado. El consumo se ha visto favorecido por medidas de estímulo del gobierno, como los programas de renovación de electrodomésticos y bienes duraderos, según declaró Xu Tianchen, economista senior de The Economist Intelligence Unit.

Sin embargo, las perspectivas para el resto del año se deterioran notablemente tras la reciente intensificación de la guerra comercial con Estados Unidos. La administración Trump ha elevado los aranceles a los productos chinos hasta el 145%, lo que ha llevado a Pekín a responder con tarifas del 125% sobre las importaciones estadounidenses, según informó Reuters el 11 de abril.

Este escenario ha llevado a entidades como UBS a recortar sus previsiones de crecimiento del PIB para 2025, del 4% al 3,4%, citando los “retos sin precedentes” que estos aranceles suponen para las exportaciones chinas y su modelo económico.

A pesar del crecimiento sólido en el primer trimestre, la economía china continúa enfrentando riesgos internos como la caída del 9,9% en la inversión inmobiliaria y presiones deflacionarias persistentes. Según Reuters, el gobierno chino ha reiterado su compromiso de aplicar nuevas aplicar nuevas medidas de estímulo fiscal y monetario.

El primer ministro Li Qiang afirmó recientemente que el país tiene “amplio margen de maniobra” para actuar ante perturbaciones externas, mientras se espera que el Politburó defina en las próximas semanas su estrategia macroeconómica para el resto del año. Fitch, por su parte, ha rebajado este mes la calificación crediticia soberana de China, advirtiendo sobre el aumento acelerado de la deuda pública.