La UE ultima nuevas sanciones contra Rusia

Bruselas busca aprobar el paquete antes del 20 de mayo, que incluye sanciones a compañías de China y Dubái “por colaborar con la logística rusa”.

Imagen de archivo del Kremlin (Moscú, Federación Rusa).
Foto: Michael Parulava/Unsplash

La Unión Europea ha comenzado a debatir un nuevo paquete de sanciones contra la Federación Rusa, el decimoséptimo desde el inicio de la guerra a gran escala de Ucrania en 2022.

Según un borrador citado por El País, la propuesta incluiría sanciones individuales contra una quincena de ciudadanos rusos y medidas contra 45 entidades, entre ellas empresas registradas en China y Dubái.

Estas últimas están señaladas por facilitar buques a la llamada “flota fantasma” que permite a Moscú sortear el embargo europeo sobre el petróleo, así como por suministrar equipamiento con potencial uso militar, especialmente en el ámbito de drones y componentes relacionados.

Las medidas están siendo discutidas en una reunión informal de ministros de Asuntos Exteriores celebrada en Varsovia, y se espera su posible aprobación en el Consejo de Exteriores del próximo 20 de mayo.

“Tenemos que poner más presión sobre Rusia”, declaró la alta representante de Política Exterior de la UE, Kaja Kallas. La ministra de Exteriores de Finlandia, Elina Valtonen, afirmó por su parte que “debemos debilitarla mediante sanciones”.

De acuerdo con fuentes diplomáticas citadas por El País, el objetivo sería “enviar una señal clara” antes de una eventual fase de negociación entre Kiev y Moscú.

El nuevo paquete llega en una semana marcada por diversos movimientos en el entorno diplomático y político del continente.

Este viernes, el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, tiene previsto asistir al desfile militar del 9 de mayo en Moscú, que celebra los 80 años desde la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nazi.

Paralelamente, varios ministros europeos prevén desplazarse a Ucrania como parte de una visita informal, en la que se anunciará también el apoyo político a la creación de un “Tribunal Especial para el Crimen de Agresión”, iniciativa que ya cuenta con un marco jurídico preliminar definido en Bruselas, según las mismas fuentes.