Miles de personas se han manifestado este domingo en Madrid para denunciar el estado actual de la sanidad pública en la Comunidad. Según cifras de la Delegación del Gobierno, acudieron unas 30.000 personas, mientras que los convocantes, agrupados en la plataforma Vecinas y Vecinos de Barrios y Pueblos de Madrid, elevaron la cifra a 200.000.
La marcha, que partió en cuatro columnas desde diferentes puntos de la capital, confluyó en la Plaza de Cibeles, donde se leyó un manifiesto que denunció el “abandono deliberado de la Sanidad Pública madrileña por parte de la Comunidad de Madrid”, y se exigió más financiación, atención primaria reforzada, fin de las listas de espera y revisión de las privatizaciones.
Entre los participantes hubo una amplia presencia de profesionales sanitarios que relataron deficiencias estructurales y condiciones laborales precarias. “Material sin esterilizar, personal sobreexplotado, sin recursos suficientes”, detalló Ana Valiente, una de las organizadoras.
Juan Carlos Serrano, enfermero de urgencias extrahospitalarias, señaló que el Gobierno regional “usurpa lo público para invertir en lo privado” y criticó los “montajes público-privados para desviar dinero de los impuestos”.
Algunos pacientes denunciaban ante Europa Press “las listas de espera interminables”, y exigen “que no se privatice la sanidad y que pongan médicos en los ambulatorios que no hay”. La protesta contó con el respaldo de los sindicatos mayoritarios y de los partidos de la oposición.