Boston Consulting Group planeó expulsar a 500.000 palestinos de Gaza a cambio de 9.000 dólares por persona

La consultora estadounidense colaboró con la “Fundación Humanitaria de Gaza”, respaldada por Israel y EE. UU., y calculó un coste total de 5.000 millones de dólares para los desplazamientos.

Varios palestinos, incluido un bebé de 5 meses, fueron asesinados en un ataque aéreo israelí en Gaza el 7 de julio de 2025.
Foto: @Timesofgaza (X)

Boston Consulting Group (BCG) diseñó un plan para la “reubicación” de 500.000 palestinos fuera de la Franja de Gaza, según una investigación publicada por Financial Times. El macabro proyecto, desarrollado entre octubre y finales de mayo bajo el nombre en clave “Aurora”, incluía la elaboración de un modelo financiero para la reconstrucción posbélica de Gaza y estimaba “paquetes de reubicación” de 9.000 dólares por persona, con un coste total de 5.000 millones de dólares.

Más de una docena de empleados de BCG participaron en el encargo, que abarcó siete meses de estudio y contratos por más de cuatro millones de dólares. La consultora colaboró en la creación de la autoproclamada “Fundación Humanitaria de Gaza” (GHF), la entidad apoyada por los gobiernos del Estado de Israel y los Estados Unidos de América, asesorando a una empresa de seguridad vinculada a la fundación. Tras la publicación de estos hechos, BCG despidió a dos socios implicados y se desvinculó públicamente del proyecto, alegando que los responsables internos “ocultaron el alcance real del trabajo a la dirección de la firma”.

La Fundación Humanitaria de Gaza ha sido objeto de críticas por parte de organizaciones internacionales y humanitarias, que denuncian matanzas en sus colas del hambre en Gaza, con el objetivo de facilitar el desplazamiento forzoso de la población palestina. Por ello, médicos Sin Fronteras ha acusado a la GHF de formar parte de “una estrategia más amplia de limpieza étnica en la Franja de Gaza”. Estados Unidos ha defendido la labor de la fundación, aclarando que “no recibe financiación directa” de Washington, aunque sí cuenta con su respaldo político.