Merz: “Rusia nos ataca hoy”

El canciller alemán acusa a Moscú de realizar “ataques híbridos” contra las fuerzas armadas alemanas, sin aportar pruebas concluyentes.

Friderich Merz, canciller de Alemania.
Foto: @bundeskanzler (X)

El canciller de la República Federal de Alemania, Friedrich Merz, ha elevado el tono en los ultimos días al afirmar en la televisión pública alemana (ARD) que “Rusia ya nos ataca hoy”, en referencia a una supuesta “campaña de sabotaje, espionaje y desinformación contra infraestructuras y fuerzas armadas alemanas”, según publica el propio mandatario en un clip de vídeo de su cuenta oficial de X y recoge el diario Der Spiegel. En estas declaraciones, Merz sostiene que “la frontera entre la paz y la guerra es fluida” y que Alemania “estaría ya siendo blanco de una ofensiva híbrida”, aunque hasta ahora no se han presentado pruebas concluyentes que respalden estas graves acusaciones.

Este cambio en la narrativa oficial muestra cierto alarmismo entre la clase política alemana tras un supuesto informe confidencial del Bundesnachrichtendienst (BND), el servicio de inteligencia alemán, que advierte de “una escalada en las agresiones rusas contra infraestructuras y fuerzas armadas alemanas”, junto con la “destrucción de cables de datos en el Mar Báltico”, “vuelos de drones sobre instalaciones militares” y “campañas de desinformación digital”.

El BND ha alertado sobre “la rápida modernización del arsenal ruso”, con una producción anual de aproximadamente 1.500 tanques y más de 2.000 drones Shahed fabricados en masa, lo que supone un aumento significativo respecto a estimaciones previas. Además, temen que Rusia utilice los mencionados “pinchazos” —supuestos ataques puntuales y medidos— para “probar la capacidad de respuesta de la OTAN” y “debilitar la confianza en el artículo 5”, que establece la defensa colectiva de sus miembros.

Sin embargo, hasta el momento, ni el Gobierno federal ni los servicios de inteligencia han hecho públicas pruebas directas que vinculen estos hechos con el Estado ruso, lo que ha generado escepticismo entre algunos analistas y sectores políticos.

Diversas voces en Alemania y en el extranjero han pedido prudencia y transparencia ante la gravedad de las acusaciones, recordando la importancia de no alimentar tensiones internacionales sin una base probatoria sólida.

Mientras tanto, Berlín ha anunciado un refuerzo de la inversión militar y una revisión de su estrategia de comunicación en materia de “seguridad”, destinando un 3,5% del PIB a este sector antes de 2029, un aumento notable respecto a los planes anteriores. Merz ha insistido en que Alemania “debe prepararse para enfrentar amenazas reales y actuales, no solo para un hipotético conflicto futuro”, y ha llamado a sus socios europeos y a la OTAN a “mantener una vigilancia constante y una postura firme ante la agresión rusa”. Las declaraciones llegan en un contexto de creciente preocupación por la estabilidad en Europa y la credibilidad de la OTAN.