El Gobierno iraní ha confirmado que Roma será la sede de la segunda ronda de negociaciones entre Irán y Estados Unidos sobre el acuerdo nuclear. La decisión ha sido anunciada por Kazem Gharibabadí, viceministro iraní de Exteriores, quien forma parte del equipo negociador de Teherán.
En las últimas semanas, la ubicación de este encuentro ha cambiado en varias ocasiones debido a motivos no especificados. Aunque inicialmente se había informado que la reunión se celebraría en Mascate, Omán, Gharibabadí minimizó la importancia de la ciudad elegida, calificando este aspecto como “secundario”.
La segunda ronda de negociaciones, que comenzará próximamente en Roma, mantendrá la dinámica de conversaciones indirectas, con Omán actuando como mediador entre las dos potencias. Según fuentes del Ministerio de Exteriores iraní, aunque se ha avanzado en algunos aspectos, persisten diferencias significativas sobre los temas que se deben negociar.
Irán ha reiterado que su disposición a discutir está limitada a su capacidad nuclear, excluyendo temas como su programa de misiles o su influencia en conflictos regionales. Por su parte, Estados Unidos, representado por el enviado especial Steve Witkoff, ha solicitado la detención y eliminación del programa nuclear iraní, incluyendo la cuestión de los misiles balísticos avanzados.
Este encuentro se sigue de la primera reunión que tuvo lugar el pasado sábado en Mascate, donde ambas partes calificaron las discusiones como “constructivas”. Sin embargo, la negativa de Irán a negociar su programa de misiles y la insistencia de EEUU en otras áreas relacionadas con su política regional ha generado tensiones. El ministro iraní de Exteriores, Abás Araqchí, reafirmó que “el derecho de su país a enriquecer uranio no es negociable”, un punto que parece estar en el centro de las diferencias entre las dos estados.