Bruselas plantea represalias arancelarias por 72.000 millones a EE. UU.

La Comisión Europea ha presentado a los Estados miembros un segundo paquete de contramedidas que incluye una lista de productos estadounidenses afectados, a la espera de una solución negociada antes del 1 de agosto.

Imagen de archivo del comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic.
Foto: @MarosSefcovic (X)

La Comisión Europea ha activado este lunes un nuevo paquete de represalias arancelarias por valor de 72.000 millones de euros como respuesta al anuncio del presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump, de imponer aranceles del 30% a productos europeos a partir del 1 de agosto. Según informa El País citando al comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, la medida se presentó durante una reunión con los ministros de Comercio y Exteriores de los Veintisiete, donde se obtuvo un respaldo “prácticamente unánime” de los gobiernos, con la excepción de Hungría.

El comisario afirma que la tasa anunciada por la Administración estadounidense es “absolutamente inaceptable” y asegura que se trata de un nivel “prohibitivamente alto para cualquier comercio”. Sefcovic había manifestado en los días previos su confianza en haber cerrado “un principio de acuerdo” con Washington, pero el sábado recibió una carta formal de Trump con el anuncio del nuevo gravamen.

Según el comisario, las nuevas contramedidas afectarían a un conjunto de productos estadounidenses cuyo listado se hará llegar en las próximas horas a los gobiernos de los estados miembros. Esta medida se sumaría a un primer paquete de represalias por de 20.000 millones de euros, que permanece técnicamente suspendido.

Pese a la escala de la posible represalia económica, la Comisión mantiene su disposición a continuar negociando con Washington “hasta el último minuto”. Según declaraba el ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, también a El País, existe una “unidad de acción” entre los Estados miembros para “buscar un acuerdo” antes del 1 de agosto, aunque recalca que “no podemos ser ingenuos” y que Europa “debe prepararse para un escenario sin pacto”.

Mientras tanto, el Gobierno español ha propuesto además la creación de un “mecanismo paraguas” para “proteger a las industrias afectadas”, utilizando parte de los ingresos recaudados a través de los nuevos gravámenes como medida de compensación.