Altos cargos de la UE detenidos en escándalo de corrupción con fondos públicos
Tres detenidos por el amaño en la adjudicación de un contrato por 2,5 millones. El 80% de los contratos de la UE por encima de 140.000 euros se adjudican mediante procedimientos secretos.
Según informa la agencia Europa Press, tres personas han sido detenidas este martes en las sedes del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) en Bruselas y el Colegio de Europa en Brujas, entre ellas Federica Mogherini, ex Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores y actual rectora de la institución educativa. La operación, dirigida por la Fiscalía Europea (EPPO) con apoyo de la Oficina Europea de Lucha Antifraude (OLAF), investiga un presunto amaño en la adjudicación de un contrato por 2,5 millones de euros para el programa de la Academia Diplomática de la UE, un curso de nueve meses para jóvenes diplomáticos de los Estados miembros. Según el comunicado de la EPPO, existen "fuertes sospechas" de infracción al artículo 169 del Reglamento Financiero, que exige competencia leal, y de la compartición de información confidencial con un postor durante la licitación de 2021-2022, cuando el contrato se otorgó al Colegio de Europa pese a la participación de otros candidatos como la Universidad de Bolonia.
Entre los detenidos figura Stefano Sannino, actual director general de la Comisión Europea para Oriente Próximo, África del Norte y el Golfo, quien fue secretario general adjunto del SEAE durante el periodo investigado y colaborador cercano de Mogherini en el Ministerio de Exteriores italiano. El tercero es Cesare Zegretti, codirector del departamento de educación ejecutiva del Colegio de Europa, un italiano-belga con vínculos en redes diplomáticas. Las sospechas incluyen no solo fraude en la contratación pública, sino también corrupción, conflicto de intereses y violación del secreto profesional, agravados por el levantamiento previo de inmunidades diplomáticas. Mogherini, nombrada rectora en 2020 pese a críticas por su escasa experiencia académica, dirige desde entonces tanto el Colegio como la Academia Diplomática, una doble responsabilidad que abría facilitado la corruptela.
La Comisión Europea, a través de su portavoz Anitta Hipper, confirmó los registros en el SEAE pero se limitó a lavarse las manos evocando el "mandato previo" de Borrell como Alto Representante, evitando dar detalles que podrían implicar a figuras actuales. Todo esto a sido posible, entre otros, gracias a la opacidad general de los procedimientos de licitación en la UE, donde el 80% de los contratos por encima de 140.000 euros se adjudican mediante procedimientos negociados sin hacerse públicos, según informes de la propia OLAF. El Colegio de Europa, cuna de miles de burócratas y diplomáticos, emitió un comunicado prometiendo "total cooperación" y reafirmando su compromiso con la "integridad", pero su silencio inicial sobre la detención de Mogherini alimenta dudas sobre su funcionamiento interno. Los tres implicados han sido interrogados en Bruselas y puestos en libertad provisional con cargos pendientes.
En un momento en que la UE destina 1.200 millones de euros anuales solo a formación y movilidad de funcionarios, este caso no es un incidente aislado: recuerda a escándalos previos como el de la Agencia Europea de Medicamentos o los sobrecostes en contratos COVID, donde existía una cercanía total entre legisladores europeos, como la propia presidenta de la Comisión, Ursula Von der Leyen, y beneficiarios empresariales, que han costado cientos de millones de dinero público.
