Canadá se suma al esquema militar de 150.000 millones de la UE
La firma permitirá a Ottawa participar en proyectos militares financiados por la UE y fortalecer la "cooperación transatlántica". El acuerdo abre la puerta a la "integración" de terceros países en la maquinaria bélica europea.
Canadá ha alcanzado un acuerdo para unirse al programa militar europeo SAFE, valorado en 150.000 millones de euros, convirtiéndose en el primer país no europeo en participar formalmente en esta iniciativa de adquisición conjunta impulsada por la Unión Europea. El portal Politico destaca que el pacto, resultado de meses de complejas negociaciones, permitirá a Ottawa acceder a proyectos de defensa financiados por el programa y a que empresas canadienses compitan en licitaciones conjuntas respaldadas por la UE.
La Comisión Europea confirmó el acuerdo y destacó que este paso "refuerza la cooperación y simboliza las prioridades compartidas entre la UE y Canadá" en materia militar. La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, celebró la incorporación de Canadá, señalando que "la unión de países afines en un mundo inestable fortalece a las naciones, beneficia a sus industrias y aumenta la seguridad de sus ciudadanos". Y es que el acuerdo llega en un momento de debilidad y aislamiento internacional europeo, en el que, tras el fracaso en Ucrania, Bruselas busca ampliar su zona de influencia en el continente americano.
El acceso de Canadá al esquema SAFE implica que podrá participar en hasta el 35% del valor de los sistemas de armas financiados por el programa, aunque deberá pagar una cuota "acorde a los beneficios esperados", considerando su PIB, competitividad industrial y nivel de cooperación con fabricantes europeos. Además, las negociaciones han abordado cuestiones como el control de la propiedad intelectual y límites a la participación de componentes no europeos en sistemas sensibles, como drones y defensa antimisiles, con el ojo puesto sobre China.
Los 19 países participantes de la UE han presentado sus planes de gasto financiados por préstamos de bajo interés, y 15 de ellos incluyen un apoyo a Ucrania con cantidades que alcanzan miles de millones de euros. Mientras tanto, las conversaciones similares con el Reino Unido fracasaron recientemente, lo que subraya la necesidad imperiosa de una alianza estratégica para la UE con Canadá.