La planta de Stellantis y CATL arranca entre opacidad, trámites acelerados y críticas por emplear 2.000 trabajadores chinos y contratistas extranjeros.
La Guardia Civil investiga finalmente a la presunta empresa corruptora por posibles irregularidades en adjudicaciones públicas relacionadas con el PSOE.
Someterá a votación el 12 de diciembre un aumento de capital y emisión de bonos que completa la operación con el presidente de Sidenor, investigado por complicidad con el genocidio en Gaza.
El agitador fascista afirma en una entrevista que "empresas y empresarios" apoyan su causa, pero evade nombrarlos: "No tengo por qué dar ninguna explicación".
La investigación abierta tras una denuncia de la Comunitat Palestina de Catalunya y la Campaña Fin al Comercio de Armas con Israel abre un incierto precedente.
Los nuevos planes de "paz" esconden grandes fines corporativos que empiezan a tener nombre propio, con BlackRock y Goldman Sachs esperando recoger los frutos de los bonos de guerra israelíes adquiridos en el genocidio.
