Desde el 28 de noviembre, más de 400 personas han sido detenidas en el marco de las protestas en Georgia, según informes del Ministerio de Interior del país. La mayoría de los arrestos corresponden a delitos administrativos, aunque más de 30 manifestantes han sido procesados penalmente. Las autoridades también han emitido sentencias de prisión administrativa contra 62 de los detenidos, mientras que más de un centenar han sido multados. Estas acciones de se producen tras intensos enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas policiales, que según fuentes oficiales, han dejado más de 150 policías heridos.
Las protestas, que se han intensificado en Tiflis, la capital, no cesan desde su inicio. Este domingo, los manifestantes se agruparon nuevamente frente al Parlamento del país por undécimo día consecutivo, según informa RT. Además de los enfrentamientos, los manifestantes lanzaron pirotecnia, encendieron hogueras y decoraron el árbol de Navidad con banderas y carteles. Los desencadenantes de estas manifestaciones fueron la congelación, hasta 2028, de las negociaciones para la adhesión de Georgia a la Unión Europea, así como la negativa de la oposición a reconocer los resultados de las elecciones parlamentarias.
El conflicto refleja las tensiones políticas en Georgia, donde la relación con la Unión Europea sigue siendo un tema clave, especialmente después de las recientes elecciones parlamentarias. Las protestas se han mantenido en pie como un desafío abierto al Gobierno y su política exterior.
