Mohamed al Bashir, ex primer ministro del Gobierno de Salvación Nacional en el Idlib tomado por las fuerzas salafistas, ha sido designado para liderar la transición política en Siria tras el derrocamiento de Bashar al Assad. Nacido en Jabal Zawiya en 1983 y con formación en ingeniería eléctrica y Sharía (Ley Islámica), Al Bashir saltó a la política en 2021 tras una década de guerra. Su gestión enfrentó protestas prolongadas contra la dominación del Hayat Tahrir al-Sham (HTS) y las malas condiciones de vida.
Durante su administración, Al Bashir enfrentó tensiones sociales y denuncias de violaciones de derechos humanos, según recuerda RTVE. Las manifestaciones exigieron el fin del monopolio político del HTS y llevaron a respuestas represivas, aunque Al Bashir intentó calmar la situación con decretos de amnistía. Ahora, tendrá que gestionar la tensión de gobernar una sociedad étnica y religiosamente diversa bajo un mando de islam suní salafista, así como reorganizar los aparatos de estado, con el respaldo del líder del HTS, Mohamed al Golani, y del primer ministro saliente, Mohamed Gazhi al Jalali.
Varios estados del mundo y la ONU han reconocido los “avances iniciales”, como la disolución de las autoridades de seguridad y la anulación de leyes antiterroristas. Mientras tanto, organizaciones como el HTS y el Ejército Nacional Sirio proturco que ocupa el norte del país siguen siendo vistas con escepticismo en el escenario global.