La Policía Nacional española ha detenido a un hombre en Utrera (Sevilla) acusado de explotación laboral ilegal a un inmigrante, quien vivía en condiciones de semiesclavitud: en un contenedor, sin acceso a servicios básicos, como agua y electricidad, según informa Europa Press. El detenido, de 45 años, fue arrestado por su implicación en los delitos de favorecimiento de la inmigración clandestina y contra los derechos de los trabajadores. La víctima trabajaba en el campo de la finca sin las mínimas garantías laborales.
El operativo policial que culminó con la detención en el municipio de Utrera, tras una investigación que permitió descubrir las condiciones de explotación ilegal a las que estaba sometido el inmigrante. Según fuentes cercanas al caso, el detenido obligaba a la víctima a trabajar trece horas al día, los siete días de la semana y casi sin descanso alguno. El empresario le “proporcionó” un contenedor de 10 metros cuadrados sin agua, ni luz, ni aseo y por el cual le cobraba 100 euros mensuales que restaba de su “nómina”.
Tras ser detenido, el hombre fue puesto en disposición de la Autoridad Judicial, que decidió dejarlo en libertad con cargos. En cuanto a la víctima, se encuentra bajo la protección de las autoridades, mientras las investigaciones continúan. Este caso vuelve a poner en evidencia la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran muchos inmigrantes que trabajan en el campo, expuestos a abusos y explotación por parte de empleadores, que actúan casi con una impunidad absoluta.