El Centro Social Ocupado La Animosa, ubicado en la calle Mar del Japón nº15 del barrio madrileño de Hortaleza, ha anunciado que ha recibido una orden de desalojo para el próximo 7 de mayo. El espacio, ocupado desde hace cuatro años por colectivos juveniles del distrito, ha funcionado como centro de actividades culturales, asambleas vecinales y proyectos políticos de base.
En un comunicado difundido, el CSO denuncia que el desalojo forma parte de una ofensiva institucional contra los espacios de organización y lucha, y responsabiliza a la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (SAREB), entidad propietaria del inmueble.
Según el colectivo, La Animosa ha servido durante estos años como un lugar de encuentro para la vecindad y como plataforma para iniciativas “que confrontan las lógicas capitalistas por construir un mundo mejor”. El espacio ha albergado asambleas, actividades culturales, talleres y servicios gratuitos para la comunidad, según describen sus integrantes.
Denuncian también que este desalojo se suma a una serie de cierres de centros sociales en Madrid, como La Traba, La Ingobernable o La Ferro, en un contexto que asocian con el “endurecimiento de leyes”, el “aumento de gastos policiales y militares” y la “normalización de empresas de desokupación”.
En el punto de mira de infiltraciones
Además del inminente desalojo, el CSO ha estado en el centro de otro episodio represivo grave. Según informó El Salto Diario, una agente de Policía Nacional española encubierta se infiltró en el centro bajo la identidad falsa de Mavi L.F., asistiendo regularmente al Gimnasio Popular Hortaleza Fighters, uno de los proyectos del espacio.
La infiltración fue detectada tras levantar sospechas por su comportamiento contradictorio y una biografía que no cuadraba con los datos comprobables. “Vimos cómo empezó a mostrar un repentino interés por los demás proyectos del espacio”, explican desde la asamblea del centro. Desde el colectivo denuncian que este tipo de operaciones policiales buscan “crear una paranoia colectiva” y anunciaron acciones.