La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, declaró en el Congreso de los Diputados que “los problemas de sobretensión en la red eléctrica podrían haber sido el desencadenante de la pérdida de generación” y la posterior caída en cascada que provocó el apagón masivo del 28 de abril en la Península Ibérica.
Según recoge El Periódico de la Energía, Aagesen asegura que los sistemas de control “detectaron volatilidad en las tensiones y desconexiones en subestaciones de Granada, Badajoz y Sevilla antes del corte total a las 12:33 horas”, y se estarían recabando datos de los operadores para esclarecer el suceso.
La ministra subrayó que, en el marco de la investigación, se han solicitado datos a los agentes energéticos más allá de los instantes previos al apagón y que “se han descartado varias de las hipótesis iniciales”, como problemas de cobertura, de reserva o de tamaño de la red.
Red Eléctrica de España y el propio Gobierno han confirmado que “no existen indicios de ciberataque ni de fenómenos atmosféricos inusuales”, y que la pérdida súbita de 15.000 MW de generación en cinco segundos fue “la causa inmediata del colapso”.
La investigación oficial continúa abierta y, según fuentes del sector y la propia ministra, aún no se dispone de una explicación definitiva sobre el origen exacto del incidente.
El Ejecutivo ha creado una comisión específica y ha ampliado el análisis a periodos anteriores al apagón, mientras Red Eléctrica y organismos europeos estarían colaborando en el esclarecimiento de los hechos.