El presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump, anunció este viernes 23 de mayo que autoriza una “alianza planificada” entre la siderúrgica japonesa Nippon Steel y la estadounidense US Steel, después de haber bloqueado su fusión en 2024.
“Esta será una alianza planificada entre US Steel y Nippon Steel, que creará al menos 70.000 empleos y aportará 14.000 millones de dólares a la economía estadounidense”, afirmó Trump en la red Truth Social. Según el mandatario, la compañía mantendrá su sede en Pittsburgh, Pensilvania, y él mismo celebrará un mitin allí el 30 de mayo.
La operación había sido paralizada formalmente en enero de 2025 por la Administración de Joe Biden, que justificó su decisión por razones de “seguridad nacional” y la necesidad de que EEUU tuviera “una industria acerera fuerte”, según declaraciones oficiales.
Trump también se había mostrado “frontalmente” en contra durante su campaña, pero tras su regreso a la presidencia y una reunión con el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, en febrero, abrió la puerta a una fórmula “intermedia” que permitiera una participación japonesa sin pérdida de control estadounidense.
Nippon Steel presentó una nueva propuesta con compromisos de inversión directa en EEUU, lo que habría sido clave para desbloquear el acuerdo, según fuentes del Ejecutivo citadas por medios estadounidenses.
Trump aseguró que “la mayor parte de esa inversión se realizará en los próximos 14 meses” y la describió como “la mayor en la historia” del estado de Pensilvania.
El precio total de la operación, según estimaciones previas al bloqueo, ronda los 14.000 millones de dólares y situaría a Nippon Steel entre los mayores productores de acero del mundo, por detrás de Baowu Steel y ArcelorMittal.