En un cara a cara en El Matí de Catalunya Ràdio, Núria Garrido, presidenta de la Unión de Propietarios y de SOM Habitatge, afirmó que “tener inquilinos es como tener un hijo pequeño”, ya que los rentistas “deben estar pendientes constantemente de problemas personales y técnicos de los arrendatarios, desde divorcios hasta averías”.
Garrido calificó la gestión de un piso en alquiler como “un incordio constante” y defendió que los propietarios “no son simples rentistas”, sino que “afrontan reformas, mantenimiento y riesgos económicos”.
Frente a las críticas de Carme Arcarazo, portavoz del Sindicato de Inquilinas, que denunció la subida de los alquileres y la precariedad de muchas viviendas, Garrido respondió preguntando “si el verdadero problema es la envidia” hacia los rentistas.
Además, destacó que “el mantenimiento de las viviendas genera empleo para pintores, fontaneros y otros profesionales”, y reclama aún mayor “seguridad jurídica” para los rentistas.
El debate ha puesto de manifiesto la creciente tensión entre una fracción social que vive de las rentas y otro sector, cada vez más numeroso, con dificultades crecientes de pagar el alquiler ante la escalada de precios, en un contexto donde la vivienda se ha convertido en la principal preocupación social en Catalunya, según el último barómetro del CEO.
Garrido también criticó las moratorias de desahucios, que según ella “dificultan la recuperación” de los pisos y “generan situaciones injustas para los propietarios”.