Desalojan a turistas sionistas franceses violentos de un vuelo en València

Vueling y la Guardia Civil reportan graves incidentes y peligro para la seguridad en vuelo, mientras el ministro israelí Amichai Chikli califica el incidente de “uno de los más graves antisemitas recientes”.

Momento en que la directora del coro de adolescentes franceses es reducida por la Guardia Civil tras adoptar una actitud agresiva en pleno vuelo.
Foto: vía ElDiario.es

El miércoles 23 de julio, en el aeropuerto de Valencia-Manises, la Guardia Civil desalojó de un vuelo de Vueling con destino a París a un grupo compuesto por 47 menores sionistas franceses, entre 10 y 15 años, y cuatro monitores, tras alteraciones graves durante el embarque. La compañía aérea informa que los menores adoptaron una “actitud altamente conflictiva”, incluyendo la manipulación indebida de equipo de emergencia e interrupción de las demostraciones de seguridad, lo que puso en riesgo la integridad del vuelo y la seguridad de todos los pasajeros y la tripulación.

A pesar de múltiples avisos, la conducta inapropiada de los turistas violentos persistió y obligó al piloto a solicitar la intervención de la Guardia Civil para proceder a su desembarque. Tras el desalojo, el grupo de adolescentes sionistas continuó mostrando comportamientos agresivos, e incluso una monitora tuvo que ser reducida y esposada, aunque no detenida, según relatan fuentes oficiales.

Desde Vueling se rechazó categóricamente que la decisión estuviera motivada por razones religiosas o de “antisemitismo”, como afirman las autoridades israelíes y lobbys sionistas como la autodenominada Federación de Comunidades Judías de España, que pidió “explicaciones detalladas y transparentes” a la aerolínea para esclarecer supuestas “motivaciones discriminatorias”.

El ministro israelí para la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, denunció en Twitter que los adolescentes “cantaban canciones hebreas” y que la tripulación respondió llamando a Israel “Estado terrorista”. El ministro ha calificando el incidente como “uno de los episodios antisemitas más graves” recientes.

Sin embargo, estas acusaciones vertidas por el sionismo contrastan con las versiones oficiales de Vueling y la Guardia Civil, nada sospechosas de ser propalestinos, que atribuyen el desalojo exclusivamente a la actitud violenta y peligrosa de los visitantes sionistas. El caso ha abierto un debate sobre la impunidad de la que gozan los turistas sionistas e israelíes con comportamientos violentos en destinos vacacionales europeos.