ZIM Integrated Shipping Services es una compañía "israelí" de transporte marítimo de contenedores que opera conectando puertos del Mediterráneo y de América del Norte mediante líneas regulares. Esta mañana del viernes 12 de septiembre, el puerto de Barcelona ha amanecido con una pintada en la bocana sur donde se podía leer No ZIM, acompañada de una gran bandera de Palestina.

Durante los meses de junio y julio de este año se produjeron protestas de la Comunidad Palestina de Catalunya, que denunciaban que el buque ZIM LUANDA, que partió de Barcelona el 1 de julio de 2025, se dirigía a Haifa (Palestina ocupada) cargado de acero. La empresa siderúrgica vasca Sidenor transportaba 122 toneladas de acero destinadas a Israel Military Industries (IMI), una compañía perteneciente al grupo militar Elbit Systems, conocido por fabricar armamento para el ejército genocida israelí.

También ha habido denuncias sobre las escalas regulares de los buques de ZIM. Según algunos informes, estos transportan material militar o de “doble uso” hacia la Palestina ocupada, pasando por puertos como Barcelona y València. Algunos apuntan a que estas escalas forman parte de las rutas habituales de la flota ZIM. Hasta ahora, existen evidencias y dudas en torno a la colaboración del puerto de Barcelona con la industria armamentística de la entidad sionista.

¿Qué evidencias hay?

ZIM tiene barcos, como el ZIM Luanda, que han navegado desde el puerto de Barcelona cargados de acero —como el de Sidenor— con destino potencial a empresas de defensa israelíes, según recoge Europa Press. Además, existen protestas sociales, políticas y denuncias judiciales reclamando la prohibición de este tráfico o que se investigue. Finalmente, que el Puerto de Barcelona sostiene que "no tiene constancia" de que la mercancía cargada viole la normativa vigente, y que el ZIM Luanda es un buque "de línea regular de ZIM", no contratado específicamente para transportar material militar.

Información en debate

No está claro que toda la carga de acero se esté utilizando para armamento, aunque IMI es fabricante militar. Hay debate sobre la información del consignatario, el destino exacto de la mercancía y los permisos legales requeridos. En cuanto a las competencias legales del Puerto de Barcelona, no está claro si puede impedir la entrada o salida de un buque en función del destino de la carga. El puerto sostiene que "solo puede hacerlo en casos de riesgo para la salud pública, la seguridad o el medio ambiente".