El militante madrileño Jorge Jiménez fue detenido a finales de junio bajo acusaciones de "revelación de secretos" y "falsedad documental", por su investigación sobre policías infiltrados en movimientos sociales en el Estado español. Según ha informado El Salto este lunes 15 de septiembre, el abogado del represaliado, Daniel Amelang, denuncia que la imputación por falsedad se basa en solicitar notas simples en el Registro de la Propiedad para fines jurídicos, investigación que Jiménez reivindica como legítima.

En cuanto a la acusación por revelación de secretos, se fundamenta en la difusión en redes sociales de información sobre infiltrados policiales, sin revelar domicilios específicos, lo que, de acuerdo con el Código Penal y la defensa, no constituye ningún tipo de delito, sino una posible "infracción administrativa", en todo caso. Además, un juez desestimó la petición policial de usar la información de su teléfono móvil como prueba por su carácter desproporcionado y atentatorio a la privacidad.

Jorge Jiménez es militante en movimientos sociales madrileños y cofundador del ya disuelto colectivo antifascista Distrito 14. El militante ha sido señalado durante años por las autoridades como referencia en la investigación de prácticas policiales ilegales. Desde 2016 ha trabajado documentando casos de infiltración, como la de los agentes encubiertos Sergio G.A. y Carlos P.M., cuyas acciones de espionaje han sido denunciados públicamente por el propio Jiménez, varias organizaciones y medios de comunicación alternativos.

Este militante participa activamente en iniciativas para identificar y exponer métodos de infiltración, incluyendo la publicación de un manual para militantes a la hora de detectar policías infiltrados, intentando salvaguardar la integridad de los espacios de lucha social.

La detención ha sido denunciada por Jiménez y sus defensores como un intento de persecución política que apunta a amedrentar a quienes visibilizan el espionaje institucional dentro de los movimientos sociales y a periodistas que investigan estas prácticas.

Su situación ejemplifica la ausencia total de reconocimiento oficial de estas infiltraciones en el Estado español. Jiménez resalta que estas acciones buscan “castigar personalmente a quienes han contribuido a destapar las prácticas policiales ilegales”.

El caso se inscribe en un contexto de escasa investigación judicial y tolerancia institucional total hacia la infiltración policial en ámbitos políticos y sociales, mientras colectivos de defensa de derechos humanos esperan un fallo del Tribunal Constitucional sobre recursos presentados por violaciones de garantías procesales vinculadas a estos hechos.

A medida que se van destapando decenas de casos de infiltraciones policiales en los movimientos sociales del Estado español, la actividad militante de figuras como Jorge Jiménez va cobrando importancia para exponer y contrarrestar la vigilancia ilegal y la reprensión política.