El precio de la gasolina podría dispararse hasta los dos euros por litro en los próximos años por la nueva normativa "climática" de la Unión Europea (RCDE2), según ha informado laSexta. El objetivo declarado del sistema es, supuestamente, "reducir un 62% las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030", en comparación con los niveles de 2005. El sistema afectará al transporte por carretera, marítimo y aéreo, así como a la industria eléctrica.

Aunque sus impulsores aseguran que el impuesto está dirigido "principalmente a las empresas contaminantes", los expertos advierten que el aumento de los costes de producción y transporte se trasladará al consumidor final, lo que supondría un encarecimiento del combustible de entre 25 y 45 céntimos por litro para cualquier persona de clase trabajadora. Si se cumplen las previsiones, la gasolina alcanzaría los 2 euros por litro y el gasóleo seguiría una senda similar.

La medida sigue los pasos la estrategia de la UE para "acelerar la transición energética" y "reducir la dependencia de los combustibles fósiles", impulsando el uso de vehículos eléctricos e híbridos enchufables. Sin embargo, asociaciones de automovilistas y expertos en movilidad advierten de que millones de conductores con coches de combustión que no pueden permitirse un vehículo de nueva generación seguirán circulando en 2027 y podrían verse gravemente afectados por el incremento del precio del combustible.

Desde Alemania, asociaciones automovilísticas como la ADAC ya han propuesto fomentar el uso del combustible E20, una mezcla con mayor porcentaje de etanol que podría "mitigar" el impacto de la subida. Sin embargo, su implantación requeriría modificaciones en las normativas europeas vigentes. Mientras tanto, el nuevo impuesto se perfila como una de las medidas centrales del plan europeo para la "descarbonización".