El Vaticano, a través del Dicasterio de Doctrina de la Fe, ha abierto una "investigación canónica" contra el obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza Boy, de 76 años, acusado de agredir sexualmente a un menor de manera continuada durante los años noventa. Según la denuncia a la que ha tenido acceso El País, los hechos ocurrieron cuando Zornoza era sacerdote y director del seminario de la diócesis de Getafe (Comunidad de Madrid). Fuentes eclesiales consultadas por el diario del grupo Prisa confirman el inicio de las pesquisas, lo que constituye el primer caso conocido en el Estado español de un obispo investigado por pederastia; aunque no se trata de una investigación penal.

La víctima relató en una carta enviada este verano que los abusos comenzaron cuando tenía 14 años. "Desde los 14 hasta los 18 años iba casi todos los fines de semana al Seminario Mayor del Cerro de los Ángeles. Durante este tiempo abusó de mí. Era por las noches cuando venía a la habitación y sufría los abusos. Se metía en mi cama, me acariciaba y besaba", detalla el denunciante. Asegura que los abusos se prolongaron hasta que cumplió los 21 años.

El afectado acusó a Zornoza de utilizar "una alta capacidad de manipulación" y de someterle a terapias de conversión para "curar" su homosexualidad. "Me convenció de entrar al seminario y me dijo que 'mi herida' (así se refería a mi homosexualidad) no me dejaba ver las cosas y que confiara en él", explica en la misiva. Este año, según el denunciante, Zornoza reconoció la manipulación y abusos cuando se enfrentaron en persona, diciendo que "nunca fue su intención".

La diócesis de Cádiz, dirigida por Zornoza, es una de las más opacas en la gestión de casos de pederastia. Según una auditoría interna de la Conferencia Episcopal Española (CEE) de 2023, a la que tuvo acceso El País, el obispado gaditano había recibido cuatro denuncias que implicaban a siete sacerdotes y 19 víctimas. La diócesis no comunicó estos casos a las autoridades, aduciendo que las víctimas "se negaron a hacerlo". Este caso eleva a 1.568 los acusados conocidos por pederastia clerical en el Estado español, con 2.954 víctimas, según la base de datos de El País a partir de 2018.

El obispo Zornoza ha continuado con su agenda oficial, oficiando misas y confirmaciones, hasta que que se ha revelado la información. Según las normas eclesiásticas, la investigación recae sobre el arzobispo de Sevilla, responsable de la provincia eclesiástica de Cádiz. El obispo Zornoza y la responsable de comunicación de la diócesis han rechazado las consultas periodísticas.

Después de las revelaciones, la diócesis de Cádiz y Ceuta ha anunciado este lunes que su obispo, Rafael Zornoza Boy, ha suspendido "temporalmente su agenda para el esclarecimiento de los hechos y para atender el tratamiento de un cáncer agresivo que está recibiendo". El comunicado, que constituye la primera vez que el prelado revela públicamente su "enfermedad", responde a la investigación abierta. La diócesis califica las acusaciones como "muy graves y además falsas", según la nota en la que añade que "no se harán posteriores declaraciones hasta conocer la decisión del tribunal eclesiástico".