Sánchez se reúne con el exlíder de Al Qaeda en Siria
Apoya desde Brasil una "transición pacífica, justa e inclusiva" con Muhammad Al Jolani, antiguo comandante del Frente Al Nusra y aliado del ISIS.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, mantuvo este viernes en Brasil su primer encuentro con Muhammad Al Jolani, actual presidente de Siria y antiguo comandante del Frente Al Nusra —la filial de Al Qaeda en el país y a ratos aliada del ISIS—, según difundió Moncloa por sus canales oficiales. El encuentro se produjo con total normalidad diplomática en el marco de la COP30 en Bélem, donde Sánchez expresó a quien fuera líder de la organización salafista el apoyo de Madrid a "una transición pacífica, justa e inclusiva" en Siria, casi un año después de la caída de Bashar Al Assad.
La reunión se produce en un contexto de "normalización" y blanqueamiento internacional de Al Jolani, que pasó de comandar el brazo de Al Qaeda en Siria a ocupar la presidencia del país. Desde Moncloa detallaron que Sánchez consideró esta transición "clave en la estabilización de la región y para poder alcanzar la paz en Oriente Próximo", trasladando "el compromiso del Estado español con la integridad territorial de Siria" y ofreciendo "cooperación humanitaria y económica". Sin embargo, críticas trasversales afean a Sánchez reunirse con un representante de una organización que ha cometido numerosos crímenes de lesa humanidad, inclusive en el propio Estado español.
El acercamiento se produce justo un día después de que el Consejo de Seguridad de la ONU levantara las sanciones contra Al Jolani, actualmente rebautizado como "Ahmed Al Sharaa" tras eliminar su nombre de guerra. La medida también se ha adoptado en el Reino Unido y se prevé que siga la Unión Europea. La rehabilitación internacional del excomandante de la facción de mercenarios salafistas se completa con su próxima visita del 11 de noviembre a la Casa Blanca, donde se reunirá con Donald Trump, siendo el primer exmiembro de Al Qaeda en ser recibido oficialmente como jefe de Estado.
Mientras las potencias mundiales normalizan las relaciones con los herederos de Al Qaeda en Siria, a los que antes decían perseguir en calidad de "terroristas", la Oficina para los Derechos Humanos de la ONU denuncia que decenas de personas siguen siendo víctimas de secuestros y desapariciones forzosas en Siria a manos de las nuevas fuerzas gubernamentales. El portavoz del organismo de las Naciones Unidas, Thameen al Keetan, documentó 97 secuestros desde solo en enero de 2025, advirtiendo que son datos incompletos porque "mucha gente no informa por miedo a lo que pueda pasarles a sus seres queridos".