Nuevo hallazgo de dinero oculto del jefe de Blanqueo de la Policía

Óscar Sánchez Gil, detenido por presunta vinculación con una red de narcotráfico, ocultaba efectivo en un segundo chalé en Alicante. La investigación apunta a que usaba su posición para proteger una estructura criminal.

Exjefe de la Sección de Delitos Económicos de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, Óscar Sánchez Gil.
Foto: El Debate

La Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional española ha intensificado su investigación sobre Óscar Sánchez Gil, jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de Madrid, detenido el pasado 10 de noviembre por su presunta implicación en una red de narcotráfico. Según fuentes de la investigación consultadas por El Debate, durante los registros realizados en sus propiedades, las autoridades descubrieron una segunda vivienda en Denia (Alicante), donde se hallaron grandes cantidades de dinero en efectivo. Sánchez, conocido como “el soso”, acumulaba más de 20 millones de euros entre sus residencias y su oficina en la Jefatura de Policía, lo que ha llevado a los investigadores a examinar en profundidad su patrimonio y posibles vínculos con el crimen organizado.

El chalé en Denia, adquirido por Sánchez en régimen de gananciales en 2022, cuenta con amplias instalaciones, incluyendo piscina, una casita en el árbol y un campo de fútbol, y está valorado en aproximadamente medio millón de euros, según fuentes citadas por El Debate. Durante el registro de esta propiedad, el 13 de noviembre, se encontraron billetes de alta denominación escondidos en falsos techos y paredes, sumándose a los fondos previamente hallados en su vivienda de Madrid. Fuentes cercanas al caso sostienen que Sánchez, en lugar de utilizar los fondos para beneficio personal, “podría haber actuado como testaferro del dinero de la organización”, aprovechando su acceso privilegiado al Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CITCO) para proteger a sus colaboradores de posibles investigaciones.

La investigación también examina posibles actividades de blanqueo, como la compra de licencias de transporte VTC y el uso de criptomonedas, además de conexiones internacionales entre los 15 detenidos, que incluyen a españoles y ciudadanos de origen hispanoamericano. Sánchez permanece en el módulo de seguridad de la prisión de Estremera desde el 10 de noviembre, donde seguirá bajo custodia mientras la policía analiza la estructura de la red y rastrea el dinero aún sin identificar.