Cerca de 170 millones usuarios estadounidenses de TikTok se quedaron sin acceso a la red social durante 13 horas después de que entrara en vigor una ley que prohíbe la aplicación por su relación con el Gobierno chino. Alegando riesgos para “la seguridad nacional”, el Congreso de EEUUU había aprobado la normativa que impedía a empresas locales prestar servicios a la red social si no desvinculaba su propiedad de ByteDance. Sin embargo, el presidente electo Donald Trump intervino prometiendo una prórroga para evitar el apagón y planteó un acuerdo para que Estados Unidos tenga un 50% de control en la compañía, según ha informado The Washington Post.
El apagón, iniciado la noche del sábado, provocó una ola de incertidumbre entre usuarios y creadores de contenido, muchos de los cuales perciben gran parte de sus ingresos de esta aplicación. TikTok emitió mensajes de despedida antes de cesar operaciones y fue retirada de las tiendas digitales. Pero Trump, que tomará posesión próximamente, aseguró el domingo que “emitirá una orden ejecutiva para ampliar los plazos de la ley y permitir un acuerdo que mantenga a TikTok operativa”. Tras estas declaraciones, la red social ha anunciado la reactivación de sus servicios, agradeciendo las garantías presidenciales.
La propuesta de Trump incluye una empresa conjunta con inversores estadounidenses para garantizar que TikTok “opere sin riesgos de espionaje o influencia extranjera”, según las preocupaciones expuestas por el Congreso y el Departamento de Justicia. Aunque la medida ha generado críticas legales y éticas, Trump busca posicionarse como “el salvador” de una de las plataformas más influyentes en Estados Unidos, mientras la discusión sobre la propiedad de TikTok sigue abierta.