Elecciones en Bielorrusia

El país celebra elecciones presidenciales este 26 de enero, donde se espera que Lukashenko renueve un séptimo mandato.

Imagen de archivo de paneles electorales de las elecciones presidenciales bielorrusas de 2020.
Foto: El Periódico

La República de Belarús celebra elecciones presidenciales este 26 de enero. Unos siete millones de bielorrusos están llamados a las urnas. Aleksandr Lukashenko, en el poder desde 1994, aspira a un séptimo mandato. Los sondeos oficiales aseguran que el actual presidente de Bielorrusia recibirá el apoyo del 82,5% de los electores.

Los bielorrusos tienen que elegir entre cinco candidatos, de los que, según los analistas occidentales, solo uno representa una ligera oposición. Además de Lukashenko, también concurren Serguéi Sirankov, del Partido Comunista de Bielorrusia; el líder del Partido Republicano del Trabajo, Alexandr Jizhniak; el hijo de un histórico político bielorruso, Oleg Gaidukevich, y la abogada Anna Kanopátskaya, del Partido Cívico Unido de Bielorrusia.

Como es habitual, la oposición no reconoce la legitimidad de las elecciones, y ha realizado una campaña pidiendo a los bielorrusos que marquen una casilla que les permita rechazar a todos los candidatos propuestos. No obstante, los opositores no han recibido un apoyo social demasiado firme hasta ahora.

El proceso electoral comenzó este martes con la votación anticipada, preparada para aquellos bielorrusos que no pueden acudir a los colegios electorales el domingo. El procedimiento especial se extiende hasta este sábado.

En las anteriores elecciones presidenciales de agosto de 2020, las más tensas de los últimos tiempos, Lukashenko fue proclamado vencedor con más del 80% de los votos. La oposición volvió a considerarlas “fraudulentas”, y Occidente respaldó a la oposición. Los opositores aseguraban que “se había falsificado los resultados y arrebatado la victoria a su candidata”, Sviatlana Tsikhanovskaya.

En este caso, Bielorrusia ha acusado al Parlamento Europeo de injerencia por condenar de antemano las elecciones presidenciales del 26 de enero, al llamar a los países del mundo a no reconocer sus resultados y a adoptar más sanciones contra Minsk. El ministro de Exteriores bielorruso, Anatoli Glaz, calificó el proyecto de “burda injerencia en el proceso electoral de un Estado soberano”, asegurando que cualquier intento de interferir sería respondido “como es debido”.

Gepolítica bielorrusa

Polonia, que actualmente ejerce la presidencia rotativa de la UE, está especialmente preocupada por la situación en Bielorrusia, dada su proximidad con una frontera de 420 kilómetros. Aunque el presidente bielorruso asegura que no emprenderá acciones contra quienes intenten migrar hacia Polonia, también acusa al país de “preparar un ataque a Bielorrusia”, en alianza con la oposición. Ante esta amenaza, Polonia ha erigido un muro a lo largo de sus fronteras con Bielorrusia y Rusia, conocido como el “Escudo del Este”. Además, Polonia teme las acciones de Lukashenko, quien anunció en diciembre que acogerá misiles balísticos hipersónicos Oréshnik, producidos por Rusia, lo que incrementa las tensiones en la región.