La ultraderecha pone en jaque al Gobierno neerlandés: amenaza con romper la coalición si no se endurece el asilo

El líder del PVV exige cerrar fronteras y expulsar a migrantes, mientras crece la tensión en el Ejecutivo de derechas.

Geert Wilders, líder del Partido por la Libertad (PVV).
Foto: @geertwilderspvv (X)

El Gobierno de Países Bajos vuelve a tambalearse tras el hórdago lanzado por Geert Wilders, líder del Partido por la Libertad (PVV). Wilders, que encabeza la principal fuerza de la coalición de derechas, ha advertido públicamente que retirará a su partido del Ejecutivo si no se adoptan medidas en las próximas semanas para frenar la llegada de solicitantes de asilo al país, mucho más estrictas.

Según recoge EFE, entre las demandas de Wilders figuran el cierre total de las fronteras a nuevos migrantes, la suspensión de la reunificación familiar, la clausura de los centros de acogida existentes y la deportación de sirios con permisos temporales.

También ha propuesto que el Ejército participe en la vigilancia fronteriza y que se retire la nacionalidad neerlandesa a quienes tengan doble ciudadanía y sean condenados por delitos graves.

El PVV, que ganó las elecciones de noviembre de 2023 pero no logró gobernar en solitario, comparte el poder con otras tres formaciones conservadoras bajo el liderazgo de un tecnócrata independiente, Dick Schoof.

La cartera de Migración y Asilo está en manos de la ultraderechista Marjolein Faber, que ya ha impulsado reformas para endurecer la política migratoria, aunque varias de ellas han recibido críticas legales y sociales.

Wilders sostiene que su partido ha sido “demasiado paciente” y que los votantes esperan “resultados inmediatos” en materia de asilo. Si no se cumplen sus exigencias, ha advertido, el PVV abandonará el Gobierno, lo que podría desencadenar una crisis política y la caída del Ejecutivo.

La presión del líder ultraderechista añade incertidumbre a una coalición que ya ha mostrado fisuras en torno a la gestión migratoria y la relación con la Unión Europea.