Pekín acusa a Taiwán y EEUU de provocar tensiones

El portavoz chino Chen Binhua asegura que las acciones de Taiwán y Washington agravan el riesgo de conflicto, pero las autoridades taiwanesas insisten en que la isla “es un país soberano” y denuncian la presión militar y diplomática de China.

El portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado chino, Chen Binhua.
Foto: @globaltimesnews (X)

El portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado chino, Chen Binhua, afirmó esta semana que “el Partido Progresista Democrático que gobierna [en Taipéi] persigue sus intereses políticos egoístas, convirtiendo la isla en un polvorín y provocando una guerra con la ayuda de EEUU, arrastrando al pueblo taiwanés a las trincheras”.

Chen también subrayó que “nadie debe subestimar la firme determinación, voluntad y capacidad del Ejército Popular de Liberación de China para defender la soberanía y la integridad territorial de su país”, y sostuvo que la reunificación de China es un “impulso histórico imparable”, según recoge la agencia Xinhua.

Las autoridades de Pekín consideran a Taiwán una “parte inalienable” de su territorio y han reiterado que la independencia de la isla es “fundamentalmente incompatible” con la paz en el Estrecho, advirtiendo que “cualquier intento de buscar apoyo extranjero para la independencia está destinado al fracaso”.

Sin embargo, el Gobierno taiwanés, encabezado por el presidente William Lai, ha reiterado su disposición al diálogo con China “siempre que exista igualdad y dignidad”, y rechaza que Pekín tenga derecho a decidir el estatus de la isla.

“La República de China es un país soberano e independiente”, declaró el jefe del Consejo de Asuntos Continentales de Taiwán, Chiu Chui-cheng, quien en declaraciones recogidas por Taipei Times acusa a China de intentar “socavar su sistema democrático a través de campañas de desinformación, presión militar y operaciones de infiltración”.

En el último año, China ha intensificado sus maniobras militares en torno a Taiwán, mientras Taipéi refuerza sus capacidades militares y denuncia el aumento de la presión y las amenazas de Pekín.

El Ejecutivo taiwanés ha anunciado nuevas medidas de seguridad y restricciones migratorias para ciudadanos de Hong Kong y Macao, argumentando “la necesidad de proteger la democracia y la libertad de la isla”.

Diferentes potencias, sobre todo Estados Unidos y la Unión Europea, ha pedido “moderación” a ambas partes y reiteran su apoyo oficial al mantenimiento del statu quo en el Estrecho de Taiwán.