El Tribunal de Cuentas del Estado español ha detectado múltiples anomalías y carencias de transparencia en las cuentas del PSOE, según los informes oficiales de fiscalización publicados en los últimos años.
Entre las deficiencias recogidas por el organismo se encuentran la ausencia de información pública sobre retribuciones de altos cargos, pagos por asistencia a reuniones, identidad de donantes de más de 25.000 euros, así como la falta de acceso a datos sobre créditos, préstamos y subvenciones a través de la web del partido.
Además, el Tribunal advierte que el PSOE no remitió información sobre un centenar de cuentas de agrupaciones locales y no incluyó en sus balances 110 cuentas bancarias con un saldo conjunto de 400.183 euros, ni contabilizó otras 295 cuentas con 302.189 euros al cierre del ejercicio.
El informe correspondiente a 2020 también señala que el partido no incluyó en su contabilidad 27 inmuebles valorados en 1,16 millones de euros y que parte de los ingresos privados fueron imputados incorrectamente, lo que dificulta la verificación de la procedencia del dinero.
El Tribunal de Cuentas ha propuesto recortes en la subvención electoral del PSOE por gastos no autorizados y por pagos fuera de plazo, además de advertir sobre la infravaloración del patrimonio neto en casi 5,2 millones de euros y la existencia de provisiones contables que no se ajustan a la normativa vigente1.
Estas conclusiones contrastan con las declaraciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien ha asegurado que “los informes del Tribunal de Cuentas han sido siempre positivos” respecto a las finanzas del partido.
Sin embargo, los documentos oficiales muestran que el órgano fiscalizador ha detectado reiteradamente irregularidades, opacidad y errores en la contabilidad del PSOE, tanto en ejercicios recientes como en años anteriores.