La Guardia Civil ha detenido a dos personas, de 20 y 27 años, por su presunta implicación en el robo de cobre que afectó a la línea de alta velocidad Madrid-Sevilla el pasado 4 de mayo, según informó Europa Press. El robo, perpetrado en cinco puntos kilométricos de la vía a su paso por la provincia de Toledo, obligó a detener la circulación de 21 trenes durante varias horas y afectó a unos 6.300 pasajeros. Adif ha valorado en 25.000 euros los daños y el material sustraído.
En el momento de los hechos, el ministro de Transportes, Óscar Puente, calificó públicamente el incidente como un “acto de grave sabotaje” y señaló la “intencionalidad” y el “carácter premeditado” del robo, subrayando que “quien robó el cable sabía lo que hacía” y que el valor económico del material sustraído era “despreciable frente a los enormes daños” causados al tráfico ferroviario. Puente insistió en que las primeras diligencias “apuntaban a un sabotaje y no a un robo común”, y defendió esta posición en varias entrevistas radiofónicas y en redes sociales.
Sin embargo, la investigación de la Guardia Civil ha concluido que se trató de un robo con fuerza llevado a cabo por personas especializadas en sustracción de cableado eléctrico, empleando técnicas específicas para evitar descargas eléctricas. En los registros domiciliarios en Orgaz y Sonseca han incautado herramientas y cable de cobre.
La operación, coordinada por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Toledo y apoyada por varias unidades especializadas, ha reforzado la vigilancia en la línea Madrid-Sevilla.