El Estado español se endeudará para aumentar el gasto militar

Moncloa ha formalizado su interés en acceder a créditos de la UE para compras conjuntas de armas, en el marco de los 150.000 millones de euros movilizados por el instrumento SAFE.

Imagen de archivo de la ministra de Defensa, Margarita Robles, repartiendo las Cruces del Mérito Militar y de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo en el Cuartel General del Ejército de Tierra.
Foto: @Defensagob (X)

La Comisión Europea confirmó este martes que el Estado español se encuentra entre los miembros de la Unión Europea que han manifestado formalmente su interés en solicitar préstamos del nuevo instrumento financiero SAFE, dotado con hasta 150.000 millones de euros para facilitar compras conjuntas de material militar entre Estados miembros.

Así lo comunicó el portavoz comunitario Thomas Regnier en rueda de prensa recogida por EFE, citando también a Bélgica, Bulgaria, Chipre, República Checa, Estonia, Finlandia, Hungría y Lituania como solicitantes hasta el momento.

El plazo para que los Veintisiete Estados miembros manifiesten su interés ante Bruselas concluía en la medianoche de este martes. El instrumento SAFE, aprobado por el Consejo de la UE a finales de mayo, se financiará a través de una emisión de deuda conjunta europea y se destinará a financiar créditos para acometer compras conjuntas de armamento y material militar. Los fondos serán transferidos a los Estados en función de sus propios planes estatales de gasto militar, permitiendo así reforzar la capacidad de adquisición armamentística en el marco comunitario.

El comisario europeo de Defensa, Andrius Kubilius, prevé que al menos una veintena de países formalicen su solicitud antes de que expire el plazo. SAFE supone el mayor plan europeo para la movilización conjunta de recursos en materia bélica y abre la puerta a un aumento relevante del endeudamiento público a 45 años vista destinado al refuerzo militar en toda la UE, en un contexto de creciente presión diplomática de EE.UU. y la OTAN y la militarización de las instituciones comunitarias.