Durante un pleno extraordinario celebrado el 28 de agosto, el alcalde de Tinajo (Lanzarote, Las Palmas, Canarias), Jesús Casimiro Machín (Coalición Canaria), admitió que el Ayuntamiento ha pagado en ocasiones el alojamiento en hoteles para agresores de violencia machista con el fin de evitar detenciones, especialmente cuando hay hijos de por medio. Estas afirmaciones causaron conmoción y fuertes críticas, que han calificado la acción como una “confesión pública de negligencia institucional” y una complicidad con la violencia machista.
Ante la polémica, el alcalde emitió un comunicado "aclarando" que sus palabras fueron "malinterpretadas", y quiso "rectificar", asegurando que "nunca se pagó alojamiento a agresores", sino "exclusivamente a víctimas en situaciones de vulnerabilidad", "especialmente cuando se niegan a interponer denuncias formales".
Machín explica que esta medida fue "una solución alternativa" ante la carencia de pisos tutelados en el municipio y reiteró "el compromiso del ayuntamiento con la protección de las mujeres" y la "aplicación rigurosa de los protocolos de violencia de género". Además, invitó a revisar la sesión completa del pleno para "contextualizar" las siguientes declaraciones: "Cuando existe algún conflicto de violencia de género, la Policía me llama y me dice: ‘Suso, tenemos un problema. O este hombre se le buscan de dejarlo a esta mujer (sic) o hay que detenerlo’. Hay hijos de por medio. Yo les digo: ‘Nada, pues como lo hemos hecho otras veces, vayan al hotel. Algunas personas tienen una noche, otras tienen cuatro'".