Pedro Sánchez ha anunciado nueve medidas para sancionar al Estado genocida de Israel frente por la matanza que está cometiendo en la Franja de Gaza, entre ellas un decreto ley que legaliza el embargo total de armas, prohibición del tránsito por puertos a combustibles para la entidad sionista y restricciones a la entrada aérea y territorial de responsables israelíes. "Son medidas muy incompletas, que llegan muy tarde y que ya veremos si se cumplen", advierte el militante palestino Taher Ali en un vídeo difundido en redes sociales, donde advierte ante los posibles triunfalismos del Gobierno.

Sin embargo, el embargo no contempla impedir el diseño tecnológico en universidades, donde hay millones en programas militares, ni bloquea otros recursos clave que pasan por los puertos, como acero y armas para el genocidio, dejando grietas importantes que pueden ser aprovechadas para mantener la maquinaria militar israelí, denuncian desde AcampadaxPalestina Madrid.

Además, aunque establece supuestas "prohibiciones de entrada" a personas implicadas en el genocidio, la evacuación de ciudadanos palestinos permanece paralizada desde hace años, lo que evidencia incongruencias prácticas frente a la retórica oficial. La prohibición de importar productos de asentamientos ilegales se presenta como "una medida para frenar el aprovechamiento económico de la ocupación", pero no se acompaña de sanciones efectivas contra las empresas involucradas ni pretende cortar todas las relaciones económicas. También se limita la asistencia consular mínima a españoles en asentamientos ilegales, sin que la embajada israelí en el Estado español vea alterada su operativa habitual.

Por otro lado, los movimientos propalestinos denuncian que el anuncio de Sánchez implica el refuerzo a la Autoridad Palestina colaboracionista. En cuanto a la ampliación de la ayuda humanitaria a Gaza, incluyendo 10 millones más para UNRWA y un incremento de fondos para cooperación hasta 150 millones en 2026, denuncian que se producen en un contexto donde el Estado de Israel y EE.UU. limitan de facto el tránsito de ayuda y la usan con fines militares, mientras que las actividades de la UNRWA están prohibidas en toda Palestina.

Denuncian también que el decreto puede ser rechazado en el Congreso de los Diputados en 30 días y requiere mayoría parlamentaria para convertirse en ley, lo que añade incertidumbre. Además, realmente no es necesaria ninguna modificación legal para establecer un bloqueo comercial contra los genocidas; simplemente basta con aprobarlo en el Consejo de Ministros.

¿OTAN sí? Bases dentro

Por último, y no por ello menos importante, está el factor estadounidense: Washington podrá seguir usando las bases militares de Rota y Morón para enviar armamento al Estado de Israel, pese al "veto" anunciado Sánchez, ya que no se modificará el Convenio de Cooperación para la Defensa entre ambos países. Según fuentes gubernamentales, el acuerdo permite al Pentágono usar estas bases sin la obligación de informar a Madrid sobre el destino final del material bélico transportado, exceptuando casos de carga o descarga de municiones y explosivos, y en esos casos tampoco podrían impedirlo.

En consecuencia, el aparente "veto" de Sánchez, que promete "prohíbir la entrada al espacio aéreo del Estado español a aeronaves que transporten armamento a Israel", no afectará en absoluto a los vuelos estadounidenses que hagan escala en territorio del Estado. Esta situación permite, por ejemplo, que aviones como el Lockheed C-5 Galaxy puedan abastecer a las fuerzas israelíes. Además, aunque el Gobierno español suspendió algunas nuevas licencias de exportación de armas al Estado de Israel desde octubre de 2023 y denegó la entrada a varios barcos con armamento, el proceso para anular la compra de 15 millones de balas israelíes sigue abierto y sin concluir. Este escenario muestra otro límite claro al embargo anunciado por Sánchez y la continuidad de la colaboración militar con Estados Unidos y, por extensión, con la Entidad sionista, por parte del Estado español.

Por ello, los movimientos propalestinos reivindican que estas medidas, más que concesiones o supuestos "actos de buena fe", son resultado de la presión social organizada que se está tornando cada vez más difícil para el Gobierno colaboracionista. Por ello, consideran que redoblar la fuerza del movimiento será clave para exigir su cumplimiento efectivo y presionar para adoptar medidas aún más contundentes.

"Hay que ir muchísimo más allá"

"Esto también nos tiene que servir para darnos cuenta de que desde algunos sectores que hegemonizan la solidaridad con palestina se está siendo demasiado corto", explica Ali. En ese sentido, el miembro de Ateneo Palestino considera que "no basta con pedir pedir un embargo de armas a Israel, no basta con pedir una ruptura de relaciones, que por cierto, de momento no se va a dar". Al contrario, Ali cree que "hay que ir muchísimo más allá": "Hay que pedir un boicot integral a todo lo que tenga que ver con la entidad colonial, hay que pedir una Palestina libre desde el río hasta el mar; hay que reivindicar la lucha armada palestina como indica la resolución 3070 de las Naciones Unidas; hay que indicar que los protagonistas de su resistencia son los representantes del pueblo palestino; hay que pedir la amnistía para todas las encausadas y detenidas por la solidaridad con Palestina y tomar medidas contra los estados que siguen persiguiendo esta solidaridad".