Estonia denuncia incursión aérea de tres cazas rusos
El incidente, negado por Moscú y calificado como “sin precedentes” por Tallin, provoca la intervención de la OTAN tras la cuarta alerta de 2025.

Tres cazas MIG-31 de la Fuerza Aérea rusa habrían penetrado este viernes sin autorización en el espacio aéreo estonio sobre la isla de Vaindloo, en el golfo de Finlandia, permaneciendo dentro del territorio de Estonia durante casi 12 minutos. Según los ministerios de Defensa y Exteriores de Estonia, las aeronaves carecían de plan de vuelo y transpondedor, y no establecieron contacto con el control de tráfico aéreo, lo que motivó el despegue inmediato de cazas F-35 italianos de la OTAN desde la base de Ämari, en respuesta dentro de la misión de Policía Aérea del Báltico.
Las autoridades estonias trasladaron su protesta formal al encargado de negocios ruso. El ministro de Exteriores, Margus Tsahkna, calificó la supuesta incursión como “descaradamente sin precedentes” e “inaceptable”, asegurando que "Rusia ha violado su espacio aéreo cuatro veces en lo que va de año". Tsahkna pidió a la UE y la OTAN “incrementar la presión política y económica” ante lo que considera "una escalada de agresividad rusa contra miembros aliados en la región".
El incidente llega solo diez días después de que casi una veintena de drones rusos cruzaran supuestamente el espacio aéreo de Polonia, lo que habría provocado por primera vez que la OTAN derribe vehículos no tripulados en territorio aliado. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y la ministra de Exteriores Kaja Kallas definieron estos sucesos como “provocaciones extremadamente peligrosas”, exigiendo una respuesta "coordinada y sanciones reforzadas frente a Moscú".
El Ministerio de Defensa ruso, por su parte, niega la violación del espacio aéreo. Según Reuters, Moscú afirma que tenía un vuelo "programado" de Karelia a Kaliningrado sobre aguas neutrales, 3 km de Vaindloo, que se habría producido en cumplimiento de normas internacionales.