La iniciativa Chat Control 2.0, apoyada explicítamente por el Gobierno español y 11 miembros más de la Unión Europeo, pretende convertir en obligatorio el escaneo preventivo de mensajes en plataformas de mensajería, correo electrónico, redes sociales y chats de videojuegos para "detectar abuso sexual infantil", entre otras excusas. Según relata la periodista y activista en derechos digitales Marta G. Franco ante El Salto, el Estado español es “el actor europeo que se ha manifestado más explícitamente a favor de acabar con la privacidad” para “que los Estados y cuerpos de seguridad tengan acceso a las comunicaciones”. La norma, que establecerá una vigilancia digital masiva, fuerza a las compañías a instalar algoritmos que analizarían todas las conversaciones y reportarían casos a las autoridades.

Expertos y defensores en materia de privacidad como Patrick Breyer, exdiputado del Parlamento Europeo, advierten que el reglamento destruiría el cifrado de extremo a extremo, exponiendo los datos a gobiernos, empresas, hackers y otros agentes. “Si el contenido de todas las comunicaciones se escanea y posiblemente se filtra a una autoridad, se acabará el secreto de las comunicaciones en el ámbito digital. Es como si Correos abriera todas las cartas por si acaso”, señala Breyer.

"Peligro para la democracia"; "cruzar el Rubicón en términos de vigilancia masiva"

Además, más de 500 científicos califican Chat Control 2.0 como “peligro para la democracia” y además lo señalan como “técnicamente inviable” para detectar abuso con precisión, algo que el Supervisor Europeo de Protección de Datos Wojciech Wiewiórowski considera un “cruzar el Rubicón en términos de vigilancia masiva”.

Los riesgos no son solo técnicos, sino también sociales y políticos, pues sentaría un peligroso precedente para una vigilancia masiva que podría extenderse a contenidos políticos, restringir la libertad de expresión y reprimir la disidencia polítiva. Activistas de derechos digitales recuerdan que este control proliferaría en un contexto donde gobiernos derechistas ganan terreno en la UE y fuera de ella, sin embargo, el caso del Gobierno español demuestra que se trata de una tendencia transversal en los partidos políticos institucionales.

La plataforma Fight Chat Control alerta que “facilitaría a gobiernos autoritarios citar las políticas de la UE para implementar vigilancia intrusiva en hogares”, violando artículos fundamentales de privacidad y protección de datos de la UE.

Cronología de las posiciones en la UE

La presidencia danesa revivió la propuesta en julio de este año, y los países han ido mostrando sus posturas: 14-15 la apoyan (incluidos los Estados español y francés, Italia y Suecia, entre otros); 9 se oponen (Austria, Chequia, Finlandia, Alemania, Luxemburgo, Países Bajos, Polonia, Bélgica, Estonia); 4 siguen indecisos. La votación está prevista para 14 de octubre, con posibilidad de bloqueo si no hay mayoría cualificada (55% estados, 65% población), por lo que la postura de Alemania podría resultar clave.