Plan respaldado por Washington propone a Tony Blair liderando la "autoridad transitoria" en Gaza
EE. UU. acepta nombrar como líder de una "administración temporal" sin participación palestina al ex primer ministro británico, cuya fundación tenía planes de expulsar a los palestinos.

Washington apoya un plan para que Tony Blair dirija una "autoridad transitoria internacional" en la Franja de Gaza, denominada Gaza International Transitional Authority (GITA), según informes de medios israelíes recabados por The Guardian. Esta instancia tendría "la autoridad política y legal suprema en Gaza" durante un periodo de hasta cinco años, inicialmente sin la participación directa de la Autoridad Palestina (PA). La propuesta incluye un "despliegue multinacional mayoritariamente árabe", avalado por la ONU, para "asegurar la transición desde una base inicial fuera de Gaza en la ciudad egipcia de El-Arish".
El plan se inspira, según sus impulsores, en experiencias de administraciones transitorias en Timor-Leste y Kosovo con el objetivo declarado de "unificar eventual y paulatinamente todos los territorios palestinos bajo la Autoridad Palestina". A diferencia de propuestas anteriores que especulaban con desplazamientos masivos de palestinos, esta asegura que "la población permanecería en Gaza", "protegida en sus derechos de propiedad", incluyendo la creación de "una unidad para preservar dichos derechos". Bajo la hipotética dirección de Blair, una secretaría ejecutiva con hasta 25 personas y una junta directiva supervisarían la administración.
Planes de expulsión filtrados
Anteriormente, filtraciones en el Financial Times revelaron que la fundación de Blair estudiaba expulsar a los palestinos de la Franja de Gaza y privatizar el territorio para realizar el sueño trumpista de convertirlo en una "riviera" al estilo de Dubai.
Por ello, proyecto se enfrenta a la negativa tajante de los palestinos, que ven a Blair como un obstáculo para la autodeterminación del pueblo palestino debido a su pasado como primer ministro británico y su respaldo a la invasión estadounidense en Irak.
El perfil de Blair, sumado a las recientes filtraciones, se interpreta como favorable a las posiciones israelíes, proporcionando una garantía para el primer ministro Netanyahu ante una "comunidad internacional" interte. La incierta y limitada inclusión de una administración palestina y la ausencia de un calendario claro de transferencia de poder generan serias reservas en países árabes y entre los palestinos.
La estructura prevista incluye varios cargos para supervisar asuntos humanitarios, reconstrucción, "seguridad" y la eventual coordinación con la Autoridad Palestina, además de un cuerpo ejecutivo que manejaría servicios técnicos bajo "supervisión internacional", buscando una gestión "tecnocrática y no partidista", según ellos.
Mientras tanto, la Asamblea General de la ONU ha respaldado una propuesta distinta para una administración "tecnocrática y temporal de un año en Gaza", cediendo el poder a la Autoridad Palestina tras reformas. La falta de claridad y el posible peso fáctico del plan respaldado por Estados Unidos, sin embargo, enturbian la situación en un contexto donde el genocidio contra el pueblo palestino no cesa, con Estados Unidos y Netanyahu afirmando que no cederán territorios colonizados en Cisjordania.