La Global Sumud Flotilla ha entrado en la zona de máximo riesgo, donde flotillas anteriores fueron atacadas. Por ello, han pedido mantener la alerta máxima y seguir vigilando los sucesos y preparando las respuestas. Las amenazas israelíes no se han hecho esperar desde antes de la entrada en la "zona de alto riesgo".

Los tripulantes han reportado durante la madrugada de este 1 de octubre la presencia de buques de las fuerzas armadas israelíes acercándose a sus posiciones cerca de la "zona de alto riesgo", a unas 120 millas náuticas de Gaza. A las 3:25 GMT, activistas han alertado públicamente que varias embarcaciones militares se dirigían a abordar los barcos principales y que se han desplegado protocolos de seguridad ante el riesgo inminente de abordaje. La mayor parte de la tripulación ha permanecido sobre las cubiertas con chalecos salvavidas, mientras se denunciaban interferencias e interrupciones en las comunicaciones.

Aumentaba la tensión cuando dos pequeñas lanchas se han posicionado junto al barco Alma, lo que ha desatado momentos de máxima alerta. Minutos después, estas embarcaciones se han alejado temporalmente de la flotilla, aunque la situación de peligro ha persistido ante el sobrevuelo de drones militares y la gran concentración de medios israelíes en el entorno marítimo. La radio pública israelí Kan ha confirmado que el ejército de ocupación israelí se prepara para interceptar los más de cuarenta barcos de la expedición y trasladar a los activistas al puerto de Asdud (Palestina ocupada) para su detención y posterior deportación.

Las tripulaciones han denunciado que, mientras la atención internacional se centraba en la zona, han sufrido intrusiones, fallos en comunicaciones y presiones por parte de la entidad sionista y diversas cancillerías europeas, que insisten en que "no crucen la zona de exclusión". A pesar de la amenaza directa y la pasividad de los gobiernos estatales, la flotilla mantiene su compromiso de llegar a Gaza con más de 500 activistas y ayuda humanitaria.

Mientras tanto, la fragata española “Furor” y otros buques europeos, que los líderes prometieron mandar, ni siquiera han alcanzado a la Global Sumud Flotilla, por lo que podrían llegar tarde para "garantizar la protección" que aseguraron, ya que la amenaza de abordaje es constante y la posibilidad de ataques o hundimientos ha sido abiertamente considerada por mandos israelíes.

Durante las últimas horas, la flotilla ha hecho un llamado urgente a la vigilancia y protección internacional, recordando que la navegación se desarrolla en aguas internacionales y que la detención o agresión constituiría un acto sin cobertura legal, algo que no parece importar demasiado a un Estado que lleva masacrando impunemente al pueblo palestino durante siete décadas.

Organismos y movimientos de todo el mundo han comenzado a presionar para que los gobiernos garanticen la seguridad de las personas a bordo. La situación es de máxima tensión, con la tripulación en alerta, mientras la Flotilla denuncia la falta de garantías y sobrevuelo de drones en una misión destinada a romper el bloqueo sobre Gaza, abrir un corredor humanitario y denunciar la inacción de los gobiernos.