El Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia (Oberaxe) ha detectado 47.717 mensajes de odio en redes sociales en los últimos treinta días, de los cuales el 94% se dirigían contra personas musulmanas (40%) o de origen norteafricano (54%), según datos difundidos por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. La cifra confirma una pauta sostenida durante todo 2025: la islamofobia concentra la gran mayoría del discurso racista en el espacio digital, muy por encima del peso poblacional de estos colectivos.

Los responsables del estudio explican a El País que los mensajes se caracterizan por la deshumanización y la incitación a la violencia, con expresiones como “matar moros” o “enemigos históricos”, recogidas en informes previos. El observatorio, que usa el sistema de rastreo automatizado FARO, ha contabilizado 718.467 publicaciones racistas en lo que va de año, con un 75% dirigidas a personas norteafricanas y un 18% a musulmanes. Los mensajes judófobos, por su parte, representan un 7%; los racistas contra afrodescendientes, un 6%; y los dirigidos contra menores extranjeros no acompañados en particular, un 3%.

Los picos de odio coinciden con momentos de tensión social. Durante los disturbios racistas en Torre Pacheco (Murcia) el pasado julio, el número de mensajes islamófobos se disparó un 1.500% en un solo día. “Hay una relación directa entre lo que ocurre en las redes y lo que sucede fuera de ellas”, advierten los responsables del estudio, que citan también la manifestación neonazi de los neonazis de Núcleo Nacional en Vicálvaro (Madrid), donde se corearon consignas como “España cristiana y no musulmana”. Según un estudio de los mismos expertos publicado en Nature, existe “una correlación positiva y significativa” entre el aumento del discurso de odio en línea y los delitos racistas cometidos en la calle sitúan a este grupo poblacional como principal foco de prejuicios racistas y religiosos.