Tras el cese de Marcos Francoy como asesor de Vox en las Cortes de Aragón, sectores del antifascismo aragonés señalan conexiones nazifascistas más profundas que recorren toda la estructura regional del partido. Francoy, cuyo cese en el puesto de secretario de Organización Territorial de Vox en Huesca aún no ha sido anunciado oficialmente, ha difundido de manera reiterada en sus redes mensajes racistas y fascistas, incluidos tweets sobre el “reemplazo étnico”, referencias nazis y mensajes de odio contra los judíos.

Pese a la gravedad de sus publicaciones, Vox evitó durante horas tomar medidas, limitándose a argumentar que “eran opiniones personales”, hasta que la repercusión mediática del perfil de X de Francoy, revelado por DIARIO SOCIALISTA, ha forzado su destitución y una crisis de Gobierno autonómico entre el PP y Vox, cuando los populares han reclamando su “cese inmediato” para poder negociar los presupuestos y los de Abascal han respondido bloqueando el acuerdo.

El portavoz de Vox Aragón edita libros con una editorial con vínculos neonazis

Sin embargo, las conexiones y simpatías nazifascistas de Vox Aragón no se detienen en el caso de Francoy. Alejandro Nolasco, portavoz autonómico y exvicepresidente de la formación, ha publicado libros en SND Editores, editorial que da voz y ofrece charlas junto a numerosas y destacadas figuras neonazis contemporáneas del Estado español, como Pedro Varela, principal ideólogo nazi del Estado español, o el recientemente fallecido Pedro Pablo Peña, líder del partido neonazi Alianza Nacional.

Pedro Varela fue presidente de CEDADE entre 1978 y 1993, por aquel entonces la principal organización neonazi en el Estado español. Dirigió la Librería Europa en Barcelona, dedicada a distribuir propaganda neonazi y negacionista del Holocausto. Ha sido condenado varias veces por delitos de exaltación del nazismo e incitación al odio, e incluso encarcelado, lo que lo ha convertido en la principal figura del neonazismo en el Estado español.

En cuanto a Pedro Pablo Peña, fue procesado por incitar al odio y a la violencia en un discurso en Barcelona en 2013 donde justificó la violencia contra el independentismo catalán, afirmando que "no habrá secesión si no es a base de mucha sangre". Además, fue acusado por enaltecer el nazismo y a Adolf Hitler en varias publicaciones en Facebook, insultar al Ejército y promover ideas racistas y judeófobas. La Fiscalía pedía contra él una pena de tres años y medio de prisión, prohibición electoral y multas por sus mensajes de odio, aunque fue finalmente absuelto.

Más allá de sus colaboradores y voces de referencia, SND también edita múltiples obras de destacadas figuras del fascismo español histórico, como Blas Piñar, José Antonio Primo de Rivera, Onésimo Redondo, Ramiro Ledesma Ramos, Julio Ruiz de Alda y toda la plana mayor de la Falange y el mismísimo Franco. De hecho, las obras de diferentes figuras fascistas o ensayos de historiadores contemporáneos que justifican el franquismo conforman gran parte del catálogo de la editorial.

Sin ir más lejos, dos de los tres libros que ha publicado el propio Alejandro Nolasco en SND han sido señalados como obras apologéticas del franquismo o el nazismo. En Los últimos 50 de la División Azul, Nolasco ensalza la figura de los españoles que fueron a invadir la Unión Soviética junto con los nazis. Según el autor, el libro recoge “el testamento histórico de cincuenta señores nonagenarios y centenarios que, en el ocaso de sus vidas, han recordado que una vez fueron jóvenes y se fueron al último confín del mundo a luchar contra el comunismo”, así como “las vivencias de unos hombres que tomaron parte en una de las últimas guerras de la historia de la humanidad en las que se luchaba por motivos románticos”. Con estos testimonios, Nolasco pretende eximir a los españoles de la División Azul de los crímenes de guerra la Wehrmacht en la URSS: "Siempre tuvieron buena relación con los civiles", afirmaba en una entrevista concedida a La Tribuna de Albacete.

En Desmemoria, Nolasco figura como coautor junto a figuras como el Presidente de la Fundación Nacional Francisco Franco, Juan Chicharro, entre otros. La tesis central de la obra consiste en lamentar "la pérdida" por la retirada de múltiples monumentos franquistas.

Publicaciones de Alejandro Nolasco en SND Editores.

"Fichaje" de un exmiembro de Alianza Nacional condenado

Más allá de la figura de Nolasco, en la provincia de Zaragoza, Vox nombró como coordinador en Cuarte de Huerva a Javier Royo, condenado por no impedir una paliza brutal que dejaría con secuelas permanentes a una persona sin techo. Royo, que se fue de copas con el agresor después de presenciar la paliza, fue excandidato del partido neonazi Alianza Nacional de Pedro Pablo Peña en 2008. Después de que elDiario.es reportara este historial, Vox se vio obligado a retirarlo.

Apología del franquismo en redes por parte de cargos electos

La penetración fascista alcanza más niveles institucionales con el nombramiento de Esmeralda Pastor como directora general de Justicia, propuesta por Vox, quien exhibe en redes la bandera preconstitucional y realiza loas al régimen franquista.

En septiembre de 2023 salió a la luz que Jorge Valero, director general de Caza y Pesca, también propuesto por Vox, ensalzaba en Facebook la figura de Millán Astray, fundador de la Legión y otro de los símbolos del fascismo español. Ambas designaciones evidencian el blanqueo institucional de valores fascistas de la mano de Vox.

Revisionismo histórico en boca de diputados

Más recientemente, El Periódico de Aragón reportaba que el diputado Fermín Civiac (Vox) hizo declaraciones en las Cortes de Aragón donde tergiversaba el Holocausto nazi con ataques al Partido Comunista y falsedades sobre el "apoyo soviético a Hitler", retorciendo la historia para legitimar el discurso revisionista: "Le quiero recordar una cosa: si los nazis alemanes hicieron lo que hicieron fue porque el Partido Comunista de la Unión Soviética se lo facilitó con el acuerdo del cual usted es heredero".

Los repetidos escándalos de Vox Aragón muestran la normalización institucional del fascismo con cobertura mediática y política entre sus filas, que sigue eludiendo la responsabilidad efectiva ante la proliferación de mensajes y prácticas que banalizan el nazifascismo en numerosos cargos públicos y orgánicos de Vox.