Ultras neonazis polacos provocan una reyerta en Vallecas
Cargas policiales, batalla campal multitudinaria y un herido en la víspera del partido entre Rayo y Lech Poznan; la Policía detiene a un miembro de Bukaneros y escolta a los fascistas.
El barrio de Vallecas (Madrid) ha vivido una madrugada de pánico debido a la llegada de cientos de ultras polacos fascistas del Lech Poznan, una de las aficiones más violentas de Europa. La incursión de los fascistas en el barrio madrileño provocó graves enfrentamientos con los seguidores antifascistas del Rayo, que salieron a defender el barrio. Testigos afirman que alrededor de 400 personas se batieron cuerpo a cuerpo en la intersección entre la Avenida de la Albufera y la calle Buenos Aires, con lanzamiento de bengalas incluido. Varios medios de comunicación lo han calificado como una "quedada acordada", sin aportar pruebas al respecto.
La Unidad de Intervención Policial (UIP) cargó con violencia, disparando con bocachas y golpeando a varias personas. Fuentes policiales reportan que la reyerta, que duró unos 10 minutos, resultó en un detenido y al menos una persona herida, ambos señalados por las autoridades como miembros antifascistas locales vinculados a Bukaneros.



A la izquierda, ultras fascistas del Kolejorz vestidos de blanco en Vallecas el 5 de noviembre de 2025. En el medio, imagen de archivo de los ultras polacos. A la derecha, ambulancias y patrullas en Vallecas tras los incidentes de este miércoles.
Los aficionados vallecanos se enfrentaron a los Kolejorz, facción principal de los ultras del Lech Poznan, conocidos por su ideología fascista y sus conexiones con el movimiento hooligan neonazi y el crimen organizado en Polonia. Testimonios e imágenes difundidas por vecinos de Vallecas en redes sociales muestran que los ultras fascistas vestían todos con camisetas blancas para distinguirse de los locales, que iban de negro. Durante el enfrentamiento, los antifascistas habrían logrado hacer retroceder a los Kolejorz, que huyeron del lugar protegidos por la Policía hasta la Puerta del Sol, donde se aloja el grueso de su expedición.
Tras despejarse los incidentes, se observó que una persona había quedado tendida en el suelo, inconsciente y sangrando por la cabeza. Los servicios de emergencia se personaron al lugar para atender al herido, que tuvo que ser trasladado al Hospital Gregorio Marañón con heridas leves y una sutura en la cabeza.
El lobby policial Jupol, en su tónica habitual, ha criticado "la falta de previsión, planificación y responsabilidad" de la delegación del Gobierno en Madrid, señalando que existía información previa sobre las intenciones de los polacos, pero que "no se desplegaron las UIP necesarias". Sin embargo, testigos consultados por DIARIO SOCIALISTA explican que la Policía había desplegado en Vallecas un macrodispositivo por la tarde.
Para el partido de esta noche, declarado de "alto riesgo" por las autoridades, se espera la presencia de alrededor de mil aficionados polacos, 200 de ellos considerados "muy peligrosos". La Policía Local de Madrid ha decidido concentrarlos a todos en la Puerta del Sol, desde donde viajarán escoltados en metro hasta el estadio de Vallecas.